Cartas al director
Con la misma libertad de expresión
Señor Puente, ministro del Reino de España, haciendo uso de la misma libertad de expresión con la que usted pone en entredicho la independencia del Poder Judicial, una gran mayoría de los ciudadanos, que aún somos capaces de abstraernos y de sacar conclusiones sin la menor influencia política, le trasladamos nuestra opinión y le hacemos saber que usted está equivocado cuando nos advierte de que el Tribunal Supremo, sin más, lo que debe hacer es aplicar la totalidad de la ley de amnistía en cumplimiento de la voluntad del legislador. Señor ministro, en la ciudadanía estamos plenamente convencidos, todavía, de que los magistrados del Tribunal Supremo saben administrar sus atribuciones con total diligencia y suma responsabilidad. En todo caso, aprovechamos para recordarle que este gobierno, en determinadas cuestiones, presuntamente, sí que denota excederse, pues manifiesta su intención de legislar asuntos muy delicados sin contar con la voluntad del pueblo soberano. No olvide que este gobierno concurrió a las últimas elecciones generales, asegurándonos, incluso con rotundidad, que la amnistía era inviable, que bajo ningún concepto tenía cabida en nuestra Constitución.
Señor ministro, hacer valer la voluntad del legislador sin el aval de la voluntad soberana de la mayoría del pueblo, no le quepa la menor duda, es más propio de un régimen autoritario que de un Estado democrático y de derecho. Y por favor, señor ministro, con el mismo raciocinio, le invitamos a que eche un pensamiento a la última voluntad del legislador, en concreto a su intención de otorgar, en exclusiva, un privilegio fiscal al independentismo catalán, así porque sí, sin sopesar, una vez más, la voluntad del pueblo.
¡Ya está bien…!
P.D.- Por cierto, todavía el figurado embajador del sanchismo en Caracas, el señor Zapatero, no ha soltado una sola palabra, no ha dicho ni mu. ¿Cómo debemos interpretarlo?