El regreso de Trump

Parecía derrotado y ahora recupera la Casa Blanca. Mayoría de los electores, el voto popular, mayoría en el Senado y la Cámara de Representantes.

Todo indica que los trumpistas no son tan ignorantes como dicen. Saben que su líder exagera a menudo y que todo lo que dice no debe tomarse literalmente, pero prefieren este discurso al lenguaje de los políticos profesionales

Los trumpistas no confunden la autoridad de un líder democrático con el fascismo.

Los trumpistas tienen derecho a criticar la globalización desregulada. Sirve a los intereses de China y a una oligarquía globalizada que se burla de los intereses del pueblo. Esto no significa que estén cerrados al mundo.

Los trumpistas no quieren una inmigración masiva, pero eso no quiere decir que sean racistas.

Los trumpistas consideran que has perdido la cabeza si piensas que basta con sentirte mujer para llegar a serlo de verdad si eres un hombre biológico.

Los trumpistas están hartos de ver a élites culturales multimillonarias moralizantes explicar a la gente corriente a qué tienen derecho a pensar o a no pensar.