De la historia a la Santidad; de la mentira al barro

La Asociación Católica de Propagandistas (ACdP) ha iniciado una oportuna y atinada campaña en favor de la incentivación del proceso de beatificación de la Reina Isabel I de Castilla, la Reina Católica. En la cara del díptico impreso, que recoge la cronología histórica de la reina, así como una oración para la devoción privada, la nombra muy acertadamente «Isabel la Católica. Reina de España. Madre de América», recogiendo los adjetivos naturales y encomiásticos de reina, de madre de sus hijos concebidos y espirituales del Nuevo Continente, amén de, como mujer que se formó en un grado muy superior a lo que correspondería según su época, para ser esposa del rey Fernando.

La declaración de beatificación de Isabel la Católica, como paso previo a la santidad oficial, viene a reconocer que su vida, llevándola como Cristo, «apresura la venida del reino de Dios, reino de justicia, de verdad y de paz», pero no significa «que abandonen sus tareas terrenas, sino que, fieles a su maestro, las cumplen con rectitud, paciencia y amor». (Catecismo de la Iglesia Católica, número 2046), lo que la Reina cumplió con creces en la Historia, no sólo de España, con la finalización de la Reconquista y reorganización del reino sino universal al ser impulsora del descubrimiento, conquista y evangelización de América. Sólo cabe invitar a todos los españoles e hispanos a conocer la verdad de su vida y de la realidad de los sucesos…

Decíamos oportuna incentivación del proceso de beatificación de la figura de Isabel la Católica en un momento, como el actual, en el que vemos diariamente la pobreza intelectual, personal y, sobre todo moral, de los políticos de hoy que, obstinados en la mentira para encubrir sus ruindades, se han visto cubiertos por el barro.