Cartas al director
Mundo desequilibrado
Termina el año 2024 dejando un panorama marcado por grandes desequilibrios.
Por un lado, los más ricos tienen motivos para celebrar: más de 14 billones de dólares están en manos de 2.700 ultrarricos, principalmente en Estados Unidos y China. Entre 2015 y 2024, su patrimonio se ha duplicado, pasando de 6,33 billones a 14,59 billones, según el banco suizo UBS.
En contraste, 3.000 millones de personas en el mundo sobreviven con menos de 3 dólares diarios. Este abismo económico pone en evidencia una desigualdad insostenible.
Otro desequilibrio lo vemos en la natalidad. Mientras sectores como la hostelería afrontan serias dificultades para encontrar trabajadores, muchas actividades como la agricultura, la pesca y el transporte dependen de una fuerza laboral envejecida. Según un informe de Deutsche Bank, España podría perder 8 millones de trabajadores para 2050, lo que agravará aún más esta crisis.
La falta de respuestas a estos problemas refleja la desconexión de nuestra clase política, que parece más interesada en proteger sus propios intereses que en abordar los desafíos urgentes de nuestra sociedad. ¿Cuánto tiempo más podremos ignorar estas señales de alerta?
Mientras tanto, estas graves señales de una sociedad desequilibrada apenas son noticia en las primeras planas de los medios de comunicación.
¿Seremos capaces de apagar estos conatos de incendio social antes de que sea demasiado tarde?