Cautivos y desarmados

El 1 de abril de 1939, desde el Cuartel General del Estado Mayor, se emitió el parte de guerra anunciando que la guerra había terminado al quedar cautivo y desarmado el ejército rojo.

El 1 de abril de 2025 se cumplirán 86 años del final de una guerra fratricida en España.

Franco murió el 20 de noviembre de 1975. Y el 20 de noviembre de 2025 se cumplirán 50 años de su muerte.

Tras su desaparición, se inició en España el proceso de la Transición. Juan Carlos de Borbón y Borbón, y Adolfo Suárez González, fueron los impulsores y figuras claves de dicho proceso a través del cual se dejó atrás, con armonía, sin acritud, sin rencillas, y mutuo acuerdo, el régimen dictatorial de Franco, y España se constituyó en un Estado social y democrático de derecho. La Constitución Española se aprobó en el año 1978.

Pedro Sánchez, sin ganar las elecciones, con el apoyo de grupos divergentes y contrapuestos logró formar el gobierno Frankestoniano. Continuó aplicando la Ley de Memoria Histórica de José Luis Rodríguez Zapatero. Y aprobó su propia ley, la ley de Memoria Democrática. Leyes que, ni son históricas ni democráticas; leyes partidistas, unidireccionales, parciales, y guerracivilísticas. Carecen de capacidad crítica por no identificar evidencias, y por no utilizar fuentes fiables. No son objetivas, asépticas y honestas en sus análisis.

Pero, he ahí el dilema, Pedro Sánchez, con su odio, rencor, y desprecio, a más de la mitad de los españoles, ha organizado unos eventos para conmemorar el 50 aniversario de la muerte de Franco. Algo que le puede salir el tiro por la culata. Todas esas propagandas van a provocar un efecto inverso. Se va a hablar mucho de Franco.

Y me hago esta pregunta: ¿Tales eventos, recordando y sacando a la palestra a Franco, no están en contra de lo que su ley de Memoria Democrática pretende?

¿Qué quiere Pedro Sánchez, cargarse a la clase media española que tanto benefició Franco? ¿Qué quiere el sanchismo, cargarse la Transición española y la Constitución? ¡Qué quiere, entonces!, ¿provocar otra contienda?