Cartas al director
¡Que Dios nos pille confesados!
Ya está! Nos van a quitar hasta los higadejos, que diría mi madre, pero no importa. Los catalanes ya tienen lo que exigieron. Oriol Junqueras anunció el lunes que el Estado se hará cargo de la deuda de la comunidad autónoma por un valor de 17.104 millones de euros —sí, 17.104.000.000 del ala–y para camuflar tal robo, la ministra de Hacienda, Mª Jesús Montero, hizo extensivo este acuerdo al resto de CC. AA., eso sí, antes hay que aprobarlo en el CPFF (Consejo de Política Fiscal y Financiera), si no pasan por el aro, no hay condonación que valga. Así, el montante global del atraco será de 83.252 milloncejos de nada y el infeliz populacho —que será el que pague la broma—, que se las apañe como pueda.
No contentos con el anuncio, el señor Sánchez se reunió con el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, para regalarle otros 1.000 millones más para gastos militares. Si el Estado quiebra –como cabe deducir por las cantidades que se manejan–, no importa, ya vendrán otros y lo arreglarán. Como dijo Mariano Rajoy en la moción de censura que nos ha traído donde estamos: «¡Que Dios nos pille confesados!».