Mis razones para una inmediata República catalana
Jamás tendremos déficit porque no habrá referencia alguna con que relacionarlo pudiendo resolver todos los problemas con una simple regla de tres. Nada multiplicado por nada y dividido por nada es igual a nada
Este artículo no va dirigido a la inmensa mayoría de la población catalana, sino tan solo a aquellos sectores que se creen superiores a los demás, consideran que su ADN es diferente al resto de los ciudadanos normales del mundo y su coeficiente intelectual supera en mucho la barrera del común de los mortales.
En los momentos de confusión que estamos viviendo en el mundo, en España y en Cataluña incluyendo aquellos catalanes a los que va dirigido este artículo, debo reconocer que después de largas diletancias, profundas reflexiones y habiendo obtenido toda la información que me brindan los medios de comunicación oficiales o a sueldo del poder, quisiera de forma simple y llana manifestar los siguiente:
1.-La república catalana es más necesaria que nunca porque si fuéramos república independiente no tendríamos que dedicar tanta energía en defensa del catalán y de nuestro fet diferencial, denostando el español, odiando a los españoles y su histórica represión hacia nosotros. De esa forma no habría problemas lingüísticos ni de rabia porque estaríamos felices solos, aislados sin tener que entendernos con nadie, ni siquiera entre nosotros. Genial.
2.-Republicanos convencidos no tendríamos necesidad de insultar a la Corona y al Patrimonio Nacional por lo que una vez devueltos todos los bienes arquitectónicos, históricos y culturales que nos impusieron y nos obligaron a adoptar en la historia, estaríamos libres de ataduras. Ni puertos ni aeropuertos, ni vías nacionales de carretera y ferrocarril, ni transporte, ni bienes patrimoniales, ni cauces, ni cuencas fluviales. Digamos la primigenia plenitud.
3.-Sin coronas ni dinastías reales ni corte ni retratos que retirar o quemar, las supremas inteligencias catalanas que se reducen a ERC, CUP, Junts y los Comunes, porque el resto de la ciudadanía ni existe ni cuenta por su miseria moral y cultural, podrían poner sobre el tapete candidaturas a Cap de l’Estat de la República Catalana CERCA. Que por aquello del catalán sería APROP, habiendo ya quien baraja nombres de excelentes candidaturas como El Tambor del Bruch, Cavall Fort, El Gegant del Pí, Lo Parrano, El Rector de Vallfogona, El Vicàri de Reus, Ot el Bruixot o el Drac català.
Todo ello por supuesto sin olvidar los innumerables mostrencos/as/es que llenan el Congreso, el Parlament y las instituciones. Como podemos observar, por candidatos que no quede, aunque el problema serán la bofetadas que habrán para escoger al CERCA o al APROP.
4.-Lloverá mucho. El Meteocat y Tempscat auguran con la república un aumento exponencial de nubes de descarga en el área catalana y solo en ella, con lo que tendremos agua en abundancia para todo tipo de necesidades incluso las abluciones islámicas, no necesitaremos agua del Ebro que desecaremos en Mequinenza o desviaremos al Júcar porque tendremos nuestras propias cuencas fluviales ricas i plenas.
Seguramente podremos exportar agua al Ródano, llenar la cuenca del Garona si nos dejan los araneses que son muy suyos y no están por la labor de la republiquita, y hasta podremos doblar las fuentes de Montjuich colorándolas con maravillosas esteladas. Nuestros campos se regarán tres veces al día y tendremos canales como el de Urgel pero naturales.
5.-No nos afectará el cambio climático porque pasará de largo como un soplo de viento del Golfo de León hacia África sin reparar en un minúsculo territorio que cual burbuja térmica jamás sufrirá ni frío ni calor. Cero grados. El nivel del mar solo subirá fuera de las aguas territoriales catalanas y la flora y fauna al no tener agresiones externas permanecerán sanas, inalterables e inextinguibles. Todos comeremos sin límite anchoas de la Escala, Suquet de peix, butifarra y espetecs y sobre todo gambas de Palamós. Como los sindicatos.
6.- ¿Y qué decir de la política de defensa catalana? Seremos un edén porque no importaremos nada ni a nadie ya que será inútil visitar nuestras felices aldeas, seremos pocos para que nos afecte la esclavización y pequeños para la invasión pues hay demasiados magrebíes y subsaharianos para tan poco catalán, llenándose todo enseguida. Catalán, bere-bere y suahili coexistirán perfectamente como idiomas sin otras injerencias lingüísticas.
Como todo será sosiego, amor y dulce convivencia, los Mossos de Escuadra, que mantendrán su número y por supuesto el sueldo, jugarán al Palé, competirán en carreras de sacos y organizarán calçotadas y caragoladas populares para delicia del personal.
7.-Desterraremos inmediatamente las tradiciones extranjeras quedándonos tan solo con los Castellers que ensayarán hasta alcanzar los dieciocho pisos, la sardana, el flaviol y la tenora, y finalmente los Raiers y La Patum. Esas son las verdaderas tradiciones históricas, ya que, teniendo los llamados Correbous, para qué queremos los toros con los violentos e inhumanos que son.
Saltaremos contentos las hogueras de Sant Joan en donde quemaremos todo el material que no sea producido en Cataluña hasta que se acabe y quedemos liberados de mácula o contagio.
8.-Las grandes empresas y corporaciones desde el extranjero velarán por nuestros intereses, nos cobrarán la hipoteca y rellenarán la cartilla de ahorro de la Sr. Pepeta y demás jubilados y pensionistas cuyos derechos y retribuciones serán sobradamente garantizados por la Seguritat Social Catalana. Nuestra balanza de pagos será simple y fácil porque ni habrá balanza ni habrá pagos ya que seremos felices con solo comer perdices. Jamás tendremos déficit porque no habrá referencia alguna con que relacionarlo pudiendo resolver todos los problemas con una simple regla de tres. Nada multiplicado por nada y dividido por nada es igual a nada. Así de simple.
Como no creo deba alargarme demasiado solo mencionar que no necesitaremos justicia porque todo será justo, encarcelaremos a los pocos españoles despistados a los que pillemos, el ADN catalán no tiene problemas sanitarios en absoluto y en las maternidades nacerán Turotos, Mwanguis, Hassans, Mohamets, que jugarán alegres con algún Oriol, Bernat o Lluc.
Lo dicho, es urgente e indispensable además de necesaria una república catalana.
Y para los demás también.
- Mariano Gomá es presidente de Foro España Cívica