Don José Lomas: un héroe que debe ser indultado
Tenemos un serio problema con el Código Penal y con nuestro Gobierno que debemos abordar de forma urgente antes de que la situación, como les está pasando a nuestros vecinos de Europa, se nos vaya totalmente de las manos
«Prefiero morir defendiendo mi casa antes que salir huyendo y dejarla en manos de unos maleantes. Es lo que conseguimos los humanos después de una larga vida de lucha, de sacrificio, de esfuerzo y de pasiones; tener un sitio donde te sientas protegido porque es tuyo y según la Constitución es inviolable».
Estas declaraciones, hechas en sede judicial, corresponden a don José Lomas, el librero octogenario que acaba de ser declarado culpable de un delito de homicidio con dolo eventual por matar de dos disparos en el año 2021 a Nelson David Ramírez, ladrón de origen hondureño que entró de madrugada en casa de don José amenazándolo con una motosierra.
Aunque el jurado popular lo haya declarado culpable, hasta dentro de unos días no sabremos de cuántos años será la condena que le va a caer a este anciano trabajador, cuyo único delito ha sido no dejarse cortar en cachitos por un energúmeno que, antes de morir, contaba en su haber con nada menos que 45 antecedentes penales: 36 de la Policía Nacional y 9 de la Guardia Civil. En fin…
Yo seré un tipo raro, no lo dudo, pero la verdad es que para mí este señor se encuentra en una posición diametralmente opuesta a la de un delincuente. Es más, para mí, en realidad, don José Lomas es un héroe con testículos forjados con acero de Damasco. Estarán conmigo en que hay que tenerlos bien puestos para agarrar la escopeta y enfrentarse a un tiparraco que está intentando entrar en tu casa armado con una motosierra. Pero claro, ustedes saben, al igual que yo, que vivimos en un país en el que para el Gobierno y para el Código Penal siempre priman los chorizos, los estafadores y los asesinos sobre las víctimas inocentes. No hay más que repasar la historia de ETA o Cataluña para darse cuenta de ello. Qué asco.
Si hubiesen estado en el pellejo de don José, ¿ustedes que habrían hecho? Yo lo tengo claro. Si el valor me lo hubiese permitido, habría hecho exactamente lo mismo que este venerable señor que con tan buena maña supo defender su vida y su propiedad hasta las últimas consecuencias. Para mí es un símbolo de la dignidad de la vieja Europa, un continente que se muere arrastrando consigo el final de todos sus grandes e históricos valores.
Si quedara algo de integridad en este país, que lo dudo, y si aún quedara algo de conciencia en nuestro Gobierno, que lo dudo con más fuerza aun si cabe, don José Lomas debería ser indultado a toda prisa. No podemos permitir que un prófugo como Puigdemont salga indemne y sonriente de sus múltiples delitos y que este mártir del putrefacto sistema muera en soledad tras las rejas de una celda. Es simplemente inaceptable.
El buenismo maníaco que nos consume protege siempre a los delincuentes y está destruyendo España. Si los políticos irresponsables y sus adláteres continúan tomando esta senda cada vez más complicada de transitar para los ciudadanos, auguro una revuelta severa en muy poco tiempo. Los políticos tienen que comprender que los españoles estamos hartos de aguantar la ineficacia de su gestión.
Yo no soy racista pero tampoco soy tonto. Y mucho menos creo en las coincidencias. Simplemente detesto que ciertas personas que vienen a nuestro país lo hagan únicamente para pasar la gorra y delinquir. Sé que los extranjeros delincuentes son minoría respecto al resto que viene a ganarse la vida a España, pero lo cierto es que esa minoría cada vez es más amplia. No hay más que leer las noticias diarias para darse cuenta de que casi siempre son los mismos…
¿Qué va a pasar si se aprueba la regulación de 500.000 inmigrantes residentes en España promovida por el Gobierno? Es que acaso los españoles vivimos en tal estado de opulencia que podemos permitirnos recibir no solo a ese medio millón de personas, sino al otro medio millón que vendrá detrás en forma de mujeres, hijos, padres, etc. No creo que seamos tan ricos, la verdad. Y todo ello, no nos engañemos, por un puñado de votos que Pedro Sánchez necesita para ganar las próximas elecciones generales. Está tan convencido de que no volverá a ganar, que tiene que comprar los votos hipotecando una vez más el futuro de todos los españoles. Ciertamente es un cáncer que tenemos que extirpar.
Por eso, es importante reivindicar con fuerza la figura de don José Lomas. Es una víctima de la permisividad ponciopilatesca a la que estamos sometidos. Y el hecho no es solo que el asaltante fuese hondureño, si fuera español yo habría defendido la misma actuación, la verdad es que, por desgracia, las estadísticas nos dicen que, cada vez más, son los extranjeros los que cometen los delitos más graves.
Según unas declaraciones hechas hace poco por el diputado de Vox, Ignacio Gil-Lázaro, «la tasa de criminalidad de extranjeros multiplica por tres la de los españoles, el 32 por ciento de los homicidios, el 39 por ciento de las violaciones, el 47 por ciento de los robos con violencia son perpetrados por extranjeros». O, según datos del propio Ministerio de Igualdad, el 49 por ciento de los presuntos asesinos de mujeres son extranjeros, cuando representan tan solo el 12,63 por ciento de la población española (según el INE, seis de 48 millones de habitantes). ¿Esto les dice algo? Los «casos aislados» comienzan a ser norma.
Algo debemos hacer. En España tenemos un serio problema con el Código Penal y con nuestro Gobierno que debemos abordar de forma urgente antes de que la situación, como les está pasando a nuestros vecinos de Europa, se nos vaya totalmente de las manos de forma irreparable. ¿Inmigración? Por supuesto que sí, pero controlada.
- Gonzalo Cabello de los Cobos es periodista