Las caras de la noticia (19/04/2025)
Salvador Illa
Salvador Illa
El presidente catalán ha tenido a bien, y no es sin tiempo, cumplir con la ley y colocar la bandera española junto a la de Cataluña en la fachada de la Casa dels Canonges, residencia oficial de los mandatarios catalanes (aunque en realidad Illa no vive en ella, como tampoco lo hacían sus predecesores). La decisión ha molestado a Puigdemont, por supuesto, que argumenta que es contradictoria con declaraciones reiteradas del PSOE a favor de «avanzar en el reconocimiento nacional de Cataluña». A su modo, Puigdemont señala una contradicción que es cierta. Tras su flema y empaque institucional, al final del día Illa da por bueno todo lo que le exigen los separatistas, desde el discriminatorio cuponazo catalán, hasta la amnistía y el control de las fronteras y la inmigración por las fuerzas de seguridad regionales. No basta con colgar la bandera española. Hay que hacer respetar lo que supone y representa.
Cándido Conde-Pumpido
Cándido Conde-Pumpido
A sus 75 años, el veterano y muy sectario jurista ha derrapado por todo lo alto con su pretensión de impedir que la Audiencia de Sevilla recurra ante el Tribunal de Justicia Europeo por el borrado de las penas de lo ERE, un escándalo mayúsculo perpetrado por Pumpido dentro de su pertinaz servilismo a Sánchez. El intento de evitar el recurso a la instancia europea ha supuesto tal osadía antijurídica que sus ecos han llegado a Bruselas, donde preocupan, según explica hoy una crónica de María Jamardo, la corresponsal de Tribunales de El Debate.
Isabel Díaz Ayuso
Isabel Díaz Ayuso caras
La localidad madrileña de Morata de Tajuña celebra desde 1987 una impresionante Pasión Viviente, que reúne a miles de visitantes cada año. Entre ellos ha estado esta vez la presidenta de Madrid. Se agradece ver a importantes dirigentes de su partido participando en actos católicos en unas fechas tan señaladas para los creyentes como las de la Semana Santa. Esperemos que cale el ejemplo. España es un país católico y un partido como el PP, que todavía se declara fiel a los principios del «humanismo cristiano» en sus bases programáticas, debería tenerlo bien presente.
comentarios
