«Parece que Bruselas considera un disparate la propuesta de España y Portugal sobre el gas»

El catedrático de Economía de la Universidad Complutense Mikel Buesa desgrana las contradicciones del paquete de medidas del Gobierno frente a las consecuencias de la invasión de Ucrania en un nuevo programa de El Debate de la Economía. Buesa destaca que se habla mucho de la rebaja del combustible y otras medidas, pero se incide poco en lo más importante: el drástico cambio regulatorio que se plantea en el sector energético español, centrado en las renovables, y sin medidas para mejorar el suministro de gas o explotar las reservas de gas que existen en España. Buesa critica que España tenga yacimientos de uranio que no puede usar para abastecer sus centrales nucleares y que tenga que importar ese uranio de Rusia, contribuyendo de este modo a financiar su invasión de Ucrania; que el Gobierno reduce los criterios medioambientales para inversiones en renovables aunque presume de ser ecologista, o que en el real decreto no se habla del gas aunque España podría abarcar 70 años de consumo, aunque esas reservas solo son extraíbles por la técnica del fracking, prohibida por la ley de la que habla Buesa. El catedrático sostiene que del real decreto se desprende que Bruselas considera un disparate la propuesta de España y Portugal de limitar el precio del gas a 30 euros el megavatio/hora. En cuanto a las bonificaciones sobre el combustible, explica por qué benefician a las rentas altas y alimentan la inflación. Lamenta que España se ve abocada a cuatro años de crisis económica.