Dulces Navideños
Contemplare, el Amazon de los monasterios de clausura
La fundación Contemplare ha puesto en marcha un canal de venta directa de pastas, repostería, dulces, cosméticos, ropa de bebé y otras golosinas hechas por 120 monasterios de clausura de nuestro país
Según los datos de la Memoria de Actividades de la Iglesia, en España quedarían 751 monasterios en cuya clausura vivirían consagradas 8.739 personas. «Si se tiene en cuenta la media de edad, más allá de focos concretos, podría decirse que la vida monástica (y religiosa) no es que languidezca. Está casi extinguida», nos señalaba Armando Pego en su reportaje.
Ante el reto de la despoblación rural, donde están enclavados buena parte de estos lugares de oración, junto a la pandemia, que ha obligado a acotar los contactos, la fundación Contemplare ha puesto en marcha un canal de venta directa de todo tipo de productos, entre ellos dulces navideños, elaborados por 120 monasterios de nuestra geografía, aunque el objetivo es llegar a todos los rincones.
Hasta el 17 de diciembre, el mercadillo ubicado en ABC Serrano cuenta con un amplio surtido de productos de estos monasterios. En el distrito de Aravaca, Contemplare dispone de su tienda física a lo largo de todo el año, además de su página web, disponible las 24 horas del día para ayudar a este pulmón de la vida eclesial que es la clausura.
El torno virtual
Mercedes Sánchez es miembro de la fundación Contemplare. «El año pasado, a pesar de la pandemia, en tres días agotamos todos y tuvieron que ir los voluntarios, con sus coches, a los monasterio más recónditos a recoger más pastas y dulces. ¡Imagínate la sorpresa de la Guardia Civil al vernos hasta arriba de cajas!», nos cuenta entre risas Sánchez.
Yemas de huevo, tejas de almendra, chocolates, mermeladas, mieles, garrapiñados o mazapanes. Pero también aceites, iconos, medallas, tallas o cremas como la de las cistercienses de Tulebras, especialmente indicaba para aliviar las irritaciones de los bebés con pañal. Contemplare asesora y acompaña a los monasterios de las distintas órdenes y congregaciones a la hora de mejorar el packaging, la imagen corporativa y los acabados de los productos, aprovechando la formación y experiencia profesional de las distintas patronas que conforman la fundación.
«Hay dos ritmos, entre la vida contemplativa y el mundo. Es algo que queremos ayudar a custodiar por el bien que supone para la Iglesia y para todos nosotros», nos cuenta Mercedes Sánchez. «Hay una señora que viene desde Cuatro Caminos, con sus muletas, teniendo que coger dos autobuses. Cada vez que la vemos venir a por unas cajas, nos dice que ella, en lo que pueda, quiere ayudar» a estas hermanas en la fe.
Polvorones en las cestas de Inditex
La cesta de Navidad del gigante textil cuenta con productos contratados a través de Contemplare, como son los polvorones y mantecados.
Del mismo modo, desde esta Fundación, en la Semana Santa de 2020, colaboraron con Carrefour, que comercializó pestiños, nevaditos, rosquillas, magdalenas y bizcochos elaborados en 11 conventos de nueve provincias españolas.