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Mia Santamaría Reina, de cuatro meses, el 25 de enero de 2020, junto a la compra que pudo hacer ese día su madreEFE

Pobreza

Cáritas alerta que persisten las razones para «huir» de la Venezuela de Maduro

El Grupo de Trabajo de la institución católica en Venezuela visibiliza las dificultades que existen para sobrevivir. Para muchas familias, 1 kilo de arroz y 1.500 gramos de harina, es todo un lujo

La red de Cáritas Internationalis, a través del Grupo de Trabajo de Venezuela (GTV) conformado,  por varias Cáritas nacionales de países receptores de venezolanos, como Cáritas de EEUU, Cáritas Canadá y varias Cáritas de Europa, entre ellas la española, viene acompañando muy de cerca desde 2017 al pueblo venezolano. Tal y como informan en su último comunicado, son millones de venezolanos los que se han visto forzados «a huir de su país, ya que éste no garantiza condiciones de vida, seguridad y oportunidades, para desarrollar una vida digna». 

En el marco de la primera Asamblea Eclesial de la Iglesia Latinoamericana y Caribeña, el Papa Francisco hizo un llamado a caminar en sinodalidad y promover la dignidad de la persona, «escuchando el clamor de los pobres, excluidos y descartados incidiendo en la transformación de las causas de pobreza e inseguridad social».

En respuesta a esto y frente al clamor del pueblo venezolano, el GTV se reunió hace unas semanas para evaluar el camino a recorrer teniendo en cuenta la importancia de «entender, colaborar y actuar» ante la crisis humanitaria y migratoria cuyo epicentro ha sido Venezuela.  

Una familia caraqueña sufre las complicaciones de hacerse con la cesta básicaEFE

«Crisis irreversible de la democracia»

Para la institución de la Iglesia, «la realidad que dio origen a la crisis humanitaria que se mantiene, acompañándose de una crisis irreversible de la democracia». Junto a esto, el drama migratorio continúa en los países limítrofes, donde, como reza el comunicado, «diariamente salen más de mil personas de Venezuela -más de un millón y medio en los últimos cuatro años-. 

La mayoría ingresa a países de destino de forma irregular, creciendo las deportaciones» y atentando contra los más vulnerables que, en palabras de Cáritas, están siendo «víctimas de las distintas formas de violencia, exclusión y del crimen organizado». Junto a esto, desde el GTV señalan el gran número de familias monomarentales, la cantidad de niños y niñas -también adolescentes- que cruzan las fronteras solos. 

Cáritas Internationalis ha querido destacar a su vez que, a pesar de las circunstancias, esta crisis migratoria e institucional que sufre Venezuela ha servido, en muchos casos, para un  crecimiento de la «solidaridad individual y comunitaria», para que crezca el llamado y respuesta de  las organizaciones de «la sociedad civil dedicadas a asistir al clamor de los pobres» y , sobre todo, para que surjan nuevos «líderes juveniles» comprometidos con el cambio. 

Personas haciendo cola para votar en las últimas eleccionesEFE

Un camino de sinodalidad también con las instituciones

El trabajo del GTV  tiene también la vocación de trabajar en la sinodalidad, tal y como se desprende del comunicado. «Caminando juntos, en espíritu dialógico, inclusivo, de cooperación con instancias de gobierno y fortalecidos en nuestras capacidades especialmente las locales».

Hasta la fecha, se han destinado más de 47 millones de euros, beneficiando a 1,4 millones de personas dentro y fuera de Venezuela, en diez ámbitos distintos, donde algunos de los más destacados son: alimentación, educación y apoyo económico para emergencias particulares.

Un joven migrante venezolando en Darién, PanamáEFE

Una huida hacia delante por un «sueño»

La situación que atraviesa el país liderado con puño de hierro por el régimen chavista, ha llevado a muchos jóvenes a huir de su país, a pesar de tener las competencias necesarias y el deseo expreso de quedarse en su tierra. Sin embargo, para poder labrarse un futuro, no queda más alternativa que salir y probar suerte en otro lado. 

«Decidí salir para cumplir mis sueños, para que mis hermanos cumplan sus sueños y ayudar a mis padres que se quedaron (en Venezuela). En mi país no se puede progresar. Tengo mis estudios, tengo todo, pero ya de nada sirve eso», cuenta a EFE un joven venezolano mientras hace fila para ser registrado en el albergue de San Vicente el pasado 23 de diciembre de 2021 en Darién, Panamá.

El apoyo de Cáritas españolas a los migrantes venezolanos en Colombia

Coincidiendo con esta reunión del GTV, Cáritas Española ha aprobado un proyecto de apoyo en Colombia a la población venezolana migrante que reside en el país y a la población colombiana de acogida en los departamentos fronterizos de Nariño y Arauca.

Este proyecto, que garantiza la continuidad del acompañamiento humanitario que Cáritas española y la red local de Cáritas viene prestando a la población migrante venezolana en la región, cuanta con un presupuesto de 653.500 euros, de los cuales la AECID (Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo) aporta 600.000 euros.

El objetivo principal de este programa es el de ofrecer apoyar a la población migrante venezolana, a la población colombiana retornada y a las comunidades receptoras de esa región que se encuentran en condiciones especiales de vulnerabilidad. 

Las acciones se centrarán en garantizar su protección jurídica y psicosocial, su acceso a la salud y unas adecuadas condiciones de higiene, actualmente agravadas por el impacto de la COVID-19.
Se estima que unas 1.500 familias (más de 6.000 personas) se beneficiarán de este proyecto, cuya finalización está prevista para agosto de 2023.

Cáritas Española mantiene activa desde hace cuatro años una campaña de solidaridad con Venezuela para apoyar las acciones humanitarias desarrolladas por la Cáritas Venezolana para proporcionar ayuda básica a las comunidades más afectadas por la larga crisis que padece el país.