Fundado en 1910

George Naoufal y Salwa Barish, un matrimonio de libaneses maronitas, posan en su casa de Dubái (Emiratos Árabes Unidos)EFE/ Bassam Madhoun

Religión

Así celebra la Navidad el millón de cristianos que vive en los Emiratos Árabes

Solo cuenta con 76 lugares de culto para los no musulmanes, por lo que muchos de los cristianos tuvieron que esperar hasta el 27 de diciembre para celebrar los rituales navideños en su iglesia

Aunque Emiratos Árabes Unidos (EAU) tiene más de un millón de residentes cristianos, solo cuenta con 76 lugares de culto para los no musulmanes, por lo que George y Salwa, un matrimonio de libaneses maronitas, tuvo que esperar al día 27 de diciembre para celebrar los rituales navideños en su iglesia.

Las iglesias cristianas en el país árabe se organizan cada año en estas fechas para recibir a los fieles en diferentes días y franjas horarias, según la rama del cristianismo a la que pertenecen, su país e idioma.

Este año, George Naoufal y Salwa Barish eligieron el sermón en árabe del día 27 de diciembre a las 20:00 horas en la iglesia de San Francisco de Dubái, uno de los 11 templos cristianos de la ciudad, al que acuden fieles de 150 nacionalidades con misas en 17 idiomas.

Misas en diferentes idiomas y horarios

«No se puede ir a la iglesia a cualquier hora como en el Líbano. Aquí se especifica según el trabajo y los compromisos de cada uno. Además, hay misas en inglés muy pronto y en árabe después de la medianoche, lo que no es conveniente la mayoría de las veces», explica a Efe George frente al templo.

La pareja comparte la misa navideña, que dura unos 45 minutos, con decenas de personas y a la salida intercambia con los demás asistentes felicitaciones, se saca fotos y enciende velas para celebrar esta Navidad con varios días de retraso.

«La Nochebuena la celebramos con un musulmán y dos cristianos de Inglaterra y el Líbano», afirma Salwa, quien se muestra agradecida por la acogida y tolerancia que ha recibido en EAU.

«Estamos en un país que respeta y acoge todas las religiones y en un tiempo récord ya me he hecho amigos de todas las religiones y compartimos la celebración de esta festividad. Estoy contenta con ello», dice mientras enciende una vela.

El ministro de Tolerancia emiratí, Nahyan bin Mubarak al Nahyan, reveló recientemente que el número de cristianos residentes en EAU ya supone una novena parte de los habitantes del país, tras haber superado el millón de personas.

La primera iglesia cristiana fue construida en 1965 en la actual capital del país, Abu Dabi, que en 2019 recibió al Papa Francisco quien celebró una misa multitudinaria a la que asistieron cristianos residentes en EAU originarios sobre todo de Filipinas y la India.

Libertad religiosa

George y Salwa son maronitas, una comunidad católica de Oriente que sigue al papa del Vaticano y es mayoritaria en el Líbano, aunque también tiene seguidores repartidos en otros países como Siria, Jordania y Egipto.

Él vive desde 2007 en Dubái, donde trabaja como ingeniero y junto a su esposa sueñan con tener una familia cristiana, y establecerse en el emirato, pues no piensan regresar al Líbano a corto plazo por las difíciles circunstancias económicas que atraviesa su país natal.

La joven pareja busca, dice, ampliar sus pequeños proyectos en este país que «les da seguridad y paz».

En su casa, situada lejos del ultramoderno centro de Dubái, han montado un árbol de Navidad y un belén tradicionales: «Mi marido y yo hemos decorado la casa, preparado la cena y canciones de Navidad, y recibido a los amigos. He preparado un menú de tres postres», indica la mujer de 33 años.

Para la decoración dice que se ha recorrido varios mercadillos navideños del emirato, donde reside desde hace dos años y ha inaugurado recientemente una empresa de comercio electrónico.

«Deseaba celebrar las festividades con mi familia en el Líbano», se lamenta George, proveniente de Kawkaba, un pueblo del sur, «pero no pudo ser, así que hemos encendido el árbol de Navidad, hemos colocado el belén e intentamos celebrar la Navidad este años con nuestros amigos en Dubái».

El libanés afirma que vive «una total libertad religiosa que EAU asegura y garantiza», debido a la destacada presencia de cristianos y otras comunidades que viven en el país musulmán, donde cada uno puede practicar sus rituales, siempre y cuando espere su turno.