El Senado acoge a la comunidad judía: «Hay que combatir el negacionismo»

Esta mañana ha tenido lugar en el Senado la conmemoración del 77 aniversario de la liberación del campo de exterminio de Auschwitz-Birkenau, coincidiendo con el Día Internacional de Conmemoración en memoria de las víctimas del Holocausto y de Prevención de Crímenes contra la Humanidad. 

El acto, presidido por el presidente del Senado, Ander Gil, ha contado con la participación de la Federación de Comunidades Judías de España (FCJE), el del Instituto de Cultura Gitana y la asociación Amical Mauthausen, que agrupa a los exdeportados republicanos de los campos de concentración del nazismo, así como a los familiares y amigos, tanto de los supervivientes como de los asesinados en los campos.

En representación de la FCJE ha estado su presidente Isaac Benzaquén, quien durante su intervención ha recordado que el origen del Holocausto «el feroz antisemitismo reinante en Europa», especialmente en la Alemania en los años 30 y ha dejado el reclamo de la memoria, para «recordar que algo así no vuelva a suceder».

En memoria de los asesinados

Para Benzaquén, «el mejor instrumento para prevenir la barbarie es la Educación». Durante su intervención ha insistido en la importancia de que las futuras generaciones estudien lo ocurrido. «Hagamos del Holocausto un instrumento para consolidar nuestra democracia y fortalecer los derechos fundamentales».

Por parte de las víctimas gitanas -comunidad que perdió a más de 500.000 personas, el 75% de los gitanos en Europa-, Diego Luis Fernández, director del Instituto de Cultura Gitana, ha manifestado la persecución que sufrieron entonces y la estigmatización que padecen todavía hoy en día. «La cuestión gitana es una cuestión de reconocimiento social y político. España es el país europeo con más posibilidad de influencia en otros países para el reconocimiento del pueblo gitano».

Durante el acto también se ha hecho memoria de los cerca de 1,5 millones de niños judíos asesinados durante los años 30 y 40 por el régimen genocida de Hitler. Concepción Díaz Berzosa, vicepresidenta de Amical Mauthausen y otros campos, ha representado a los deportados españoles en los campos de concentración nazis. «Nunca será suficiente recordar que la estrategia del nazismo se basa en el olvido».  Para Berzosa, «vivimos tiempos preocupantes, con pintadas antisemitas en las calles, ataques a sedes de organizaciones, a monumentos simbólicos y esvásticas en calles. Esto hay que denunciarlo para defender la democracia», señalaba.

«Sensibilizar a los jóvenes» 

Durante el acto de Estado, la ministra de Justicia, Pilar Llop ha recordado «con emoción lo que nunca debió ocurrir: la persecución y asesinato de inocentes por el nazismo». «Estamos en un acto imprescindible -proseguía Llop- porque no queremos ni debemos olvidar el Holocausto. Nuestro deber es reconocer la verdad y escuchar a los supervivientes, no permitir banalizaciones y mantener viva la memoria», para terminar ahondando en la importancia de «sensibilizar a los jóvenes en el respeto y la tolerancia». 

El presidente del Senado, Ander Gil, ha finalizado el acto pidiendo respeto a la memoria de estos acontecimientos históricos y sobre la importancia de «combatir a los voceros del negacionismo y activistas de la indiferencia».

Por último, el presidente del Senado ha agradecido a las personas e instituciones que «han luchado porque el testimonio de las víctimas se mantenga presente».