Los obispos colombianos cargan contra el aborto a los seis meses de embarazo: «Es una práctica violenta»
«El aborto directo es un acto inmoral y una práctica violenta contraria a la vida». De esta forma se han pronunciado en la Conferencia Episcopal colombiana contra la decisión de la Corte Constitucional
La vida pierde una nueva batalla en Colombia. Aquellos que han sido convocados a existir, han visto su derecho más fundamental vulnerado por la Corte Constitucional de este país, que en el día de ayer, votó la despenalización del aborto hasta la semana 24 de embarazo. La decisión ha sido provocada por por las organizaciones abortistas y feministas que con el pretexto de proteger la vida y la salud de las mujeres, lo que ha generado es que se pueda abortar a niños de 6 meses.
A esta nueva realidad jurídica, los obispos colombianos han expresado en un reciente comunicado su «perplejidad y profundo dolor» por lo la negativa a reconocer a otro ser humano en el vientre materno. Sin ir más lejos, los prelados del país caribeño señalan con esta decisión que se está vulnerando el punto 2 del artículo 95 de la Constitución política de Colombia, donde se exigen como deberes de la persona y del ciudadano «obrar conforme al principio de solidaridad social, respondiendo con acciones humanitarias ante situaciones que pongan en peligro la vida o la salud de las personas».
«Ya que esta virtud permite crear alternativas de bien, allí donde el mal se enarbola como única opción, queremos ser los primeros en ayudar a encontrar la opción buena cuando el aborto parece ser la solución. Lo hacemos en nombre de Aquel que vino a traer vida en abundancia, con la esperanza de que también el Estado, así como todos los compatriotas de buena voluntad, no escatimarán esfuerzos para proteger y promover la vida humana, aun en las circunstancias más complejas», concluyen los obispos.
El presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, Luis José Rueda Aparicio, arzobispo de Bogotá; el vicepresidente, Omar Alberto Sánchez Cubillos, arzobispo de Popayán; y el secretario general, Luis Manuel Alí Herrera, obispo auxiliar de Bogotá, han elevado un mensaje al conjunto de la feligresía y de la sociedad en favor de la «solidaridad creativa en favor de la vida».
Una medida récord contra la vida
La medida, en cualquier caso, no elimina el delito del aborto del Código Penal, pero da un plazo de seis meses a las gestantes que quieran poner fin a su embarazo. Este límite es el mayor plazo de toda Hispanoamérica y está por encima de todos los países europeos, incluida Suecia, que fija el periodo máximo para abortar en 18 semanas. En España, es de 14 semanas, casi la mitad.
Centenares de mujeres se manifestaron con júbilo por la decisión en las calles de Colombia, mientras otras tantas lamentaron la decisión. A lo largo de las últimas semanas, grupos provida han vuelto a invocar la campaña 40 Días por la Vida, dirigida a acabar con el aborto mediante «la oración, el ayuno, la sensibilización de la comunidad y una vigilia pacífica, diaria y constante frente a los abortorios».