Fundado en 1910

El Santo Padre tras la audiencia general del pasado miércoles 16 de marzoAFP

El Papa, sobre la guerra en Ucrania: «La humanidad está amenazada por un abuso perverso de poder»

Francisco ha señalado que las escenas bélicas de Ucrania «recuerdan a los grandes conflictos del siglo pasado»

El Papa Francisco ha instado a los gobernantes a intentarlo todo para abrir un «diálogo constructivo» que ponga fin «a la tragedia humanitaria» en Ucrania.

«Una vez más la humanidad está amenazada por un abuso perverso del poder y por los intereses de parte, que condenan a la gente indefensa a sufrir toda forma de brutal violencia», ha advertido el Papa en su mensaje con ocasión de la tercera edición de las Jornadas Sociales Católicas Europeas, que tiene lugar en Bratislava (Eslovaquia) del 17 al 20 de marzo.

El evento está organizado por la Comisión de las Conferencias Episcopales de la Unión Europea (COMECE), el Consejo de las Conferencias Episcopales de Europa (CCEE) y el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral.

El Santo Padre ha reiterado su preferencia por la vía diplomática y ha pedido oraciones para que los gobernantes «no dejen de intentarlo todo para frenar la guerra y abrir un diálogo constructivo para poner fin a la enorme tragedia humanitaria que está causando».

Francisco ha señalado que las escenas bélicas de Ucrania «recuerdan a los grandes conflictos del siglo pasado». «La tragedia de la guerra que se está consumando en el corazón de Europa nos deja atónitos», ha apreciado.

«Compartir la angustia de un pueblo»

Además, ha agradecido a las conferencias episcopales de los países que hacen frontera con Ucrania su «respuesta unánime» en ayudar a esa población, «garantizando la ayuda material, la acogida y la hospitalidad».

«El grito angustioso de nuestros hermanos ucranianos nos empuja como comunidad de creyentes no solo a una seria reflexión, sino también a llorar con ellos y a hacer algo por ellos; a compartir la angustia de un pueblo herido en su identidad, en su historia y en su tradición. La sangre y las lágrimas de los niños, el sufrimiento de las mujeres y los hombres que están defendiendo su tierra o escapando de las bombas que golpean nuestra conciencia», ha subrayado.

Por otro lado, ha instado a Europa a llevar a cabo una reacción «opuesta» a la guerra. Si bien no se ha referido directamente a la decisión de los países europeos a aumentar el gasto militar, sí ha instado a refundar «una arquitectura de paz a nivel global, donde la casa europea, nacida para garantizar la paz después de las guerras mundiales, tenga un rol primario». Por último, ha señalado que los cristianos no pueden «quedarse de manos cruzadas».