Ocho lecturas que te atraparán espiritualmente esta Semana Santa

En pleno corazón de la Semana Santa ya vivimos. Tan anhelada y que ya muestra tintes de hacer historia, superando todas las previsiones interrumpidas, de forma dramática, hace dos años. Y lo proclama el aroma a azahar de naranjos. Incluso cuando la lluvia amenaza la salida de las procesiones y no nos queda otra que arrimarnos a un muro mirando al cielo con esperanzas de que las nubes no rompan. Un florecer de esperanza que se conmueve ante el paso caminante. Marea de túnicas de color azul, verde, magenta, blancas, encarnadas…

Estos días son perfectos también para sumergirnos entre tantos libros que nos llevan a desentrañar el misterio y descubrir la historia junto a otros más inspiradores y singulares, perfecto complemento a nuestros sentidos que van atrapando por las calles el instante para la eternidad. Son muchos los autores que han evocado la pasión, desde Gerardo Diego, «Getsemaní de los óleos / hoy almazara de angustias» o el narrador, ensayista y novelista Aquilino Duque viendo a la Esperanza de Triana, «cruza un arco de lágrimas, arquera, / y a punta de saetas abre el día; / abre de par en par a Andalucía / y enséñale a llorar a tu manera». Déjese llevar. Rodéese de un buen arsenal de torrijas y pestiños y aproveche el duermevela de la noche o la sobremesa, cuando las tardes se relajan de la tarea y salimos al encuentro de las cofradías en cualquier esquina de la ciudad transformada en una preciosa postal.

Con los cinco sentidos

Entre el voltear de campanas en la mañana escoja estas tres obras verdaderamente clásicas. Gabriel Miró escribió el libro más apropiado para leer durante estos días, una forma de acercarse a Dios a través de la belleza: Figuras de la pasión del Señor. A través de su prosa poética, Miró nos guía con los cinco sentidos entre poemas que huelen, ante el estallido del esplendor de la huerta, a campos de mirtos, cidra, támaras de dátiles, sauces y acacias mientras se derraman los cebadales entre «viña verde, olor de sembrado maduro». Un prodigio de sensorialidad: «En la paz de las aguas y del aire» se desliza el vuelo «de plata y de rosa de las garzas»; «resuenan arroyos» entre «manzanos floridos». Y, qué buen gusto el horno de «panes cenceños», «peces en salmuera», «odres de vino de trigo y de frutas» y «dátiles de Jericó». Lo avisaba Gabriel Miró, «la palabra no ha de decirlo todo, sino contenerlo todo». La espiritualidad del Evangelio narrado como nadie ha sabido hacerlo. Como seguro quedará con más ganas de Miró, desde la Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes puede acceder a su obra gratuitamente.

Cartas de la madre Teresa de Calcuta. La Madre Teresa representa un símbolo universal de caridad y compasión para los fieles. Sin embargo, poco sabemos de su espiritualidad o luchas internas. Las Cartas, en su mayoría inéditas, las escribió a su círculo más cercano durante sesenta años. Descubriremos sus tristes dudas al sentirse rechazada por Dios y sus reflexiones sobre su propio cometido en esta vida. La santa confesaba a su director espiritual tener «noches oscuras», nada lejano a otros «compañeros» como san Juan de la Cruz. Nada más lejos de la oscuridad, esas cartas muestran las ganas de creer que acogía en su interior, nunca dejó de perseverar en su fe.

La esperanza en un mundo que agoniza

Jesús de Nazaret (edición completa), de Joseph Ratzinger. Una defensa de la fe hacia la gente sencilla, Benedicto XVI es un teólogo que se lee y se comprende a la perfección. Siete años empleó en escribirla, tras una investigación personal. Resulta un libro clave, y hasta aquí puedo leer…

En esta breve antología no faltaría Dios ha nacido en el exilio, de Vintila Horia, escritor rumano afincado en España en los años 50. Novela hoy, desafortunadamente, sumida en la desmemoria colectiva. De una gran calidad destacada por escritores como Antonio Colinas, «la excelente obra olvidada de Horia, la obra de un exiliado, nacionalizado español, y que recibió el Premio Goncourt». Narra el exilio de Ovidio en el país de los de los dacios, la actual Rumanía. En ese entorno de extrañamiento y soledad, el poeta vislumbra la esperanza en un mundo que agoniza y en el que los dioses antiguos son incapaces de dar una respuesta.

Fracaso y éxito

De Pablo d’Ors, El olvido de sí, conmovedora novela sobre el beato Charles de Foucauld, noble francés, explorador y militar de vida disipada, que a los 28 años se convierte y hoy es referente de la «espiritualidad del desierto». Según d’Ors, «encarna de una manera más emblemática, hermosa y rotunda lo que yo entiendo por hacer de la propia vida una obra de arte». En la vida de Foucauld, prototipo del converso, pueden reconocerse todos los fracasados de la historia. Apóstol de los tuaregs, vivió en el Sáhara como ermitaño. Será canonizado este próximo mes de mayo.

En la misma línea de fracaso y éxito, tan a propósito para Semana Santa, Tenga usted éxito en su muerte, de Fabrice Hadjadj. El anti-manual para el éxito humano, escrito en luminosos trallazos por este provocador, apasionado y profundo autor. Indicado para cualquier edad, ya se encuentre usted en los 70 años o en los 20.

Apologetas y narradores de viajes

De la mano de Scott Hahn, uno de los grandes apologetas estadounidenses, nos adentramos en la espiritualidad más profunda con La cuarta copa. Aúna las reflexiones en torno a las raíces judías de Jesús y el ritual de la Pascua judía con la propia trayectoria de conversión del autor. Es conveniente llegar con un mínimo de formación religiosa a su lectura.

Y no podemos olvidar a los grandes narradores de viajes, ahora que más de uno prepara la maleta. Un tiempo de callar, del inolvidable escritor de viajes Patrick Leigh Fermor. Relata con su habitual genialidad y carácter flemático su estancia en diversas abadías e introduce al lector en ese modo de vida de oración, silencio y trabajo de la vida contemplativa, en ocasiones, plena de ironía.