La Iglesia española en datos ¿Cuánto cobra un cura en España?
La memoria de Actividades de la Iglesia señala que la retribución del clero en 2020 fue de 196 millones de euros
Uno de los argumentos más esgrimidos contra la Iglesia católica es que sean los contribuyentes los que sostengan los salarios de los sacerdotes; independientemente de sus propias convicciones personales. Como es sabido, la Iglesia percibe sus ingresos de la recaudación por dos vías. La primera, marcando la X en la casilla de la Declaración de la Renta. La segunda, en el mismo documento, apoyando a las ONG en su labor donde la Iglesia, por su carácter constitutivo en el marco legal y normativo español, también percibe un porcentaje por su forma jurídica y su actividad; que no es otra que estar al servicio de los fieles en particular y de la sociedad en general.
Los que se muestran contrarios a este tipo de emolumentos, independientemente de que se conozca o no su labor caritativa, educativa y asistencial, achacan en sus que sean unos vagos con la casa y dietas pagadas y que encima estén «chupando» del bote de las arcas públicas.
Esto es, a la luz de los datos ofrecidos por las diócesis y por la propia Conferencia Episcopal Española, detallado en su última Memoria de Actividades de la Iglesia, desde cualquier punto de visto, un bulo ampliamente extendido.
¿Cuánto cobra un sacerdote de pueblo?
Según los datos facilitados por la CEE en su última memoria de 2020, auditada, como viene siendo habitual en los últimos 10 años por PwC, en España existen 16.568 sacerdotes y 119 obispos entre titulares y auxiliares; a los que se retribuye con 196.090.719,97 euros. Esto supone una media de 11.751 euros divididas en 14 pagas de 839,36 euros al mes, o lo que serían 979,25 en 12 pagas. Este importe, tras la aprobación de la subida del salario mínimo interprofesional de este año, ascenderá hasta los 1.000 euros al mes.
En cualquier caso, hoy por hoy, su percepción mensual, en la mayor parte de territorios eclesiásticos, oscila entre los 800 y los 1.300 euros al mes. Por poner dos ejemplos de dos realidades muy diferentes como son la de la archidiócesis de Sevilla o la diócesis de Guadalajara. Un cura en el territorio hispalense cobra 900 euros. Su obispo, José Ángel Saiz Meneses, al igual que sus auxiliares, perciben 1.258 euros al mes cada uno. En el caso de la diócesis seguntina y caracense, lo que percibe cada uno de los 216 sacerdotes que hay es de 978,58 euros.
Salarios, en definitiva, que no llegan al mileurismo y que sin embargo supone en su actividad ordinaria más de 29.000.000 horas al año dedicadas al trabajo en las parroquias; que no se limita exclusivamente a la impartición de los sacramentos en el templo, sino que se extiende a visitas pastorales, acompañar a los enfermos, atender en despacho a toda persona que así lo requiera y componer el equipo parroquial compuesto mayoritariamente por laicos para la administración de los recursos de la vida comunitaria.
Memoria Actividades de la Iglesia
La labor caritativa, educativa y asistencial de la Iglesia en 2020 en datos
En la presentación de la Memoria en la Fundación Pablo VI el pasado 12 de mayo, conocíamos el testimonio de Aurelio Carrasquilla, vicario para la Pastoral Caritativa y Social en la diócesis de Getafe y párroco de Nuestra Señora de Zarzaquemada, en el municipio de Leganés.
«En 21 años de sacerdote no he tenido dos días iguales en mi vida», señalaba Carrasquilla, que detalló su jornada, que empieza a primera hora de la mañana y termina, en algunas ocasiones, cuando hay Vigilias o actos con jóvenes, pasada la medianoche.
Memoria de actividades de la Iglesia
La pandemia esquilma el cepillo de la Iglesia, la principal vía de ingreso de las diócesis
¿Cuánto suman a la Seguridad Social?
Tras la liquidación de la asignación tributaria en 2020 la Iglesia percibió por esta vía, con más de 40.050 nuevas declaraciones a favor respecto al año anterior, un montante de 298.054.051 euros. Esto es el 29 % de los más de mil millones de euros que la institución genera a través de la aportación voluntaria de los fieles (más de 310 millones de euros), de los ingresos de patrimonio (237 millones), otros ingresos corrientes (325 millones) y extraordinarios por valor de 57 millones.
Las cotizaciones pagadas a la Seguridad Social por el conjunto de sacerdotes diocesanos, regulado desde 1977, hace dos años fue de 23,8 millones de euros. Dinero que revierte en beneficio de toda la sociedad.