La hermana Theresa Seow
Una organización musulmana premia a una monja por su labor en Singapur
«El diálogo interreligioso no es un extra opcional: es parte de la misión evangelizadora de la Iglesia», dijo la hermana Seow durante la ceremonia de entrega del galardón.
La organización sin ánimo de lucro, Amiyah Singapore, dedicada al bienestar y desarrollo de los musulmanes de Singapur, honró a una religiosa católica por su trabajo en la cooperación interreligiosa, en una ciudad de marcado acento multicultural, ya que con una población estimada en cinco millones y medio de personas, los budistas representan el 31,1 %; los cristianos el 18,9 %; los musulmanes el 15,6 %; los hindúes el 5 % y los taoístas, que representa el 8 %.
La misión de la Iglesia
La hermana Theresa Seow, de las Hijas de la Caridad Canossianas, fue una de las dos ganadoras del Premio Interreligioso Ejemplar de Jamiyah Singapur, según informó UCANews. «El diálogo interreligioso no es un extra opcional: es parte de la misión evangelizadora de la Iglesia», recordó la hermana Seow durante la ceremonia de entrega del galardón.
Una forma eficaz de dar a conocer y amar a Jesús es estar con nuestras hermanas y hermanos de otras religiones
La hermana Theresa es miembro del Consejo Católico Archidiocesano de Singapur para el Diálogo Interreligioso, y está involucrada en el diálogo interreligioso desde la década de 1990, cuando el entonces arzobispo de Singapur, monseñor Gregory Yong, la nombró en 1995 representante diocesana ante la Organización Interreligiosa de Singapur (IRO). Posteriormente, se convirtió en la primera mujer presidenta de la IRO en 2003.
Armonía en la vida cotidiana
El Vaticano ya premió sus esfuerzos interreligiosos cuando el Papa san Juan Pablo II la nombró consultora del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso entre 2001 a 2004.
Seow es actualmente la directora ejecutiva de Canossaville, un centro social para niños que la hermana, como dijo en la ceremonia, refleja «una forma eficaz de dar a conocer y amar a Jesús es estar con nuestras hermanas y hermanos de otras religiones, para que sepan que somos cristianos por nuestro amor, nuestra aceptación y nuestras palabras».
Además, Seow deseó «que todos trabajemos en silencio por la paz y la armonía interreligiosa en nuestra vida cotidiana, guiados por el Espíritu de paz de Dios, porque los esfuerzos humanos por sí solos no harán que la paz suceda».