¿Por qué no hay prensa escrita el Sábado Santo?

La tradición de no publicar prensa escrita el Sábado Santo es principalmente observada en algunos países con fuertes tradiciones católicas o cristianas. El motivo detrás de esta práctica está relacionado con el respeto y la solemnidad asociados con la Semana Santa, especialmente el Triduo Pascual, que comprende el Jueves Santo, Viernes Santo, y culmina el Domingo de Resurrección.

El Sábado Santo, también conocido como Sábado de Gloria, es un día de reflexión y espera en el que los fieles cristianos conmemoran el día en que Jesucristo yacía en el sepulcro después de su crucifixión y muerte el Viernes Santo. Es un día caracterizado por el silencio y la oración en preparación para la celebración de la Resurrección de Jesús el Domingo de Pascua.

Una señal de respeto y un descanso para los medios

La ausencia de prensa escrita es una expresión de respeto hacia este periodo de reflexión y recogimiento. Se evita la distracción que podría significar el consumo de noticias y se promueve un ambiente de serenidad y contemplación. Además, este día suele ser aprovechado por los medios impresos para realizar mantenimiento, actualizaciones y preparaciones para las ediciones de Pascua, que a menudo incluyen contenidos especiales relacionados con esta festividad.

En España, esta ausencia de prensa el Sábado Santo se enmarca dentro de la Ley de Prensa establecida el 22 de abril de 1938. Al ser el Viernes Santo fiesta nacional en todo el territorio español, las diferentes cabeceras en papel no salden a la calle al día siguiente, salvo en Cataluña y la Comunidad Valenciana, ya que estas dos comunidades trasladan el festivo al Lunes de Pascua.

Fue diseñado así para proporcionar un período de descanso a los empleados del sector de la información dentro de un país de creencias católicas y con un gran aprecio por las costumbres religiosas. Por tanto, este tiempo de pausa se extiende durante Navidad (25 de diciembre) y Año Nuevo (1 de enero), resultando en una reducción de la operación de quioscos durante la temporada de vacaciones, particularmente el Sábado Santo, cuando el número de tiendas abiertas suele ser menor al habitual en días festivos.