Siria estrena su colosal monumento de 52 metros a la Virgen María
Erigido sobre un cerro de 400 metros de altura, el complejo incluye una iglesia ortodoxa
En la noche del pasado sábado, cientos de luces iluminaron el cielo de Al-Hawash, cerca de la ciudad de Homs (Siria). Esta vez no se trataba de bombas, como en otras ocasiones, sino de fuegos artificiales para celebrar la inauguración del colosal monumento de 52 metros de altura dedicado a Nuestra Señora de Oriente. Miles de personas se congregaron en la explanada situada a los pies de la inmensa estructura coronada por una estatua blanca de la Virgen María de ocho metros de altura.
Al-Hawash es un municipio de alrededor de 4.000 habitantes, la mayor parte de ellos cristianos ortodoxos. Uno de ellos, Khalil Michel Nakad, es el impulsor de la construcción del complejo que cuenta con una iglesia de estilo bizantino con capacidad para unas 300 personas, una gran explanada, una sala polivalente para 150 personas, aparcamiento, un centro de recepción de visitantes y la torre. Nakad ha querido cumplir así con el voto que le hizo a la Virgen María por «haber estado a su lado cuando sufrió una dura prueba de salud durante la cual estuvo al borde de la muerte».