Fundado en 1910
Menú
Cerrar

Alfonso Simón, en una imagen de archivoAlfa y Omega

Muere Alfonso Simón, el histórico delegado episcopal de Alfa y Omega

El sacerdote de la diócesis de Madrid, pionero de la evangelización a través de los medios de comunicación, falleció este martes a los 77 años tras pasar casi dos semanas en la UCI

Decenas de personas han llamado cada día, desde hace dos semanas, al teléfono móvil de sus hermanas, para interesarse por el frágil estado de salud de Alfonso Simón, sacerdote de la diócesis de Madrid e histórico delegado episcopal del semanario Alfa y Omega. Finalmente, este martes Simón fallecía a los 77 años, a consecuencia de la misma «complicación médica» en el sistema digestivo y en el aparato respiratorio que lo había mantenido en la UCI del Hospital Clínico durante este tiempo.

Pionero de la evangelización a través de los medios de comunicación, desde 1994 y hasta 2015 Alfonso Simón fue la mano derecha de Miguel Ángel Velasco, en aquellos años director del semanario católico que edita el arzobispado de Madrid. De hecho, tras la jubilación de Velasco, durante sus meses finales al frente de Alfa y Omega, Alfonso Simón llegó a ser nombrado director, antes de que se produjesen los cambios impulsados por el entonces arzobispo matritense, el hoy cardenal Carlos Osoro.

Amigo personal de numerosos obispos y arzobispos, y singularmente próximo al cardenal Rouco, junto a su vocación de divulgación periodística, Simón cultivó con gran esmero su faceta de biblista. Doctor en Teología Bíblica por la Pontificia Universidad Santo Tomás, de Roma, y experto en los textos evangélicos relativos a la infancia de Jesús, en 2019 publicó «El Paraíso abierto», una llamativa y sugerente investigación sobre las palabras del anciano Simeón a la Virgen María.

Hasta pocos días antes de su ingreso hospitalario, mantuvo una incesante actividad pastoral como capellán de la Facultad de Periodismo de la Universidad Complutense, como confesor en la céntrica parroquia del Cristo de la Victoria, así como en torno a la Renovación Carismática Católica y el movimiento Comunión y Liberación.

La capilla ardiente se ha instalado en la parroquia del Cristo de la Victoria (C/ Blasco de Garay, 33), donde residía, y estará abierta al público a lo largo del miércoles, de 8:30 a 13h, y de 17 a 20h. A las 19:00 se celebrará un funeral al que está previsto acudan numerosos sacerdotes y obispos.