El obispo de Almería celebra una misa a bordo de la fragata Blas de Lezo
Monseñor Antonio Gómez Cantero visitó la embarcación que permaneció unos días atracada en el puerto de la ciudad andaluza
El pasado domingo por la mañana, el obispo de Almería, monseñor Antonio Gómez Cantero celebró la santa misa en la fragata Blas de Lezo, que se encontraba atracada en el puerto de la ciudad, tras participar en el ejercicio naval Eagle Eye. Se trata de un importante evento conjunto militar que incluyó maniobras de defensa aérea junto a otras unidades de la Armada Española, destacando el compromiso de esta fragata en la protección y defensa nacional.
Durante la misa, el prelado «compartió un mensaje de fe, esperanza y reconocimiento a su labor como servicio público, y al finalizar la ceremonia, fue obsequiado con un recuerdo de su visita y estancia entre los marinos, quienes agradecieron su presencia y cercanía», ha explicado el obispado de Almería. Estuvo en todo momento acompañado por el capellán castrense de la diócesis, el teniente coronel Francisco Ruiz.
La fragata Blas de Lezo arribó en Almería el sábado, 2 de noviembre, y permaneció hasta el lunes, 4 de noviembre. La noche de su llegada, la tripulación realizó un emotivo homenaje a todos los que dieron su vida por España, incluyendo un recuerdo especial a los fallecidos en las recientes riadas en el Levante español. En el acto litúrgico estuvieron presentes la «Promoción Almería» de Oficiales de la Armada, quienes recibieron el título de «hijos adoptivos» de la ciudad en reconocimiento a su compromiso y vínculo con Almería desde su juramento de bandera en 1971.
La fragata «Blas de Lezo» pertenece a la clase Álvaro de Bazán fue construida por los astilleros de NAVANTIA y se entregó a la Armada en el año 2004. Actualmente tiene su base en el Arsenal Militar de Ferrol y cuenta con una dotación de 205 personas al mando del capitán de fragata Pedro Ramos Carbonell.
El buque toma su nombre del héroe naval español teniente general Blas de Lezo y Olavarrieta, quien defendió la ciudad de Cartagena de Indias (en la actual Colombia) en 1741 con solo 3.000 soldados, enfrentándose a una flota inglesa de más de 30.000 hombres bajo el mando del almirante Edward Vernon, que sufrió una humillante derrota.