María Dolores Sobrino: la mujer que fue asesinada delante de su párroco

Nació el 19 de abril de 1868 en Constantina, Sevilla y fue bautizada al día siguiente en la parroquia de Santa María de la Encarnación. Contrajo matrimonio canónico con Rafael Cabezas Ruival y no tuvieron hijos.

María Dolores era una mujer muy religiosa. Frecuentaba mucho la parroquia para rezar y, por su condición de madre sin hijos, para colaborar con el párroco Manuel González-Serna. En la parroquia de san José fue donde se enteró del movimiento militar iniciado en Marruecos en julio de 1936.

Ataques a los símbolos religiosos

Como consecuencia de la aplicación de la ley secularizadora y laicista, Constantina fue víctima durante los años 30 de múltiples ataques a los símbolos religiosos, prohibiciones de rituales católicos en público, etc.

La intransigencia contra la Iglesia se convirtió en violencia extrema a partir del golpe militar. Además de la destrucción de todos los edificios religiosos, el párroco y otros dos sacerdotes fueron asesinados.

La detención de María Dolores

En julio de 1936 se ordenó la detención de María de los Dolores Sobrino. Acompañada por múltiples personas al interior del templo donde la esperaban, se mandó el desalojo de todo aquel que no portase armas.

Allí le mostraron el cadáver del párroco, asesinado de manera despiadada. Acto seguido le dispararon a bocajarro, acabando con su vida a los 68 años de edad. Ambos cadáveres fueron sometidos a numerosas profanaciones, hasta ser conducidos al cementerio de Constantina.

Hoy reposan en el panteón colectivo erigido en honor a las víctimas de aquellos sucesos.