El obispo emérito de Hong Kong, Joseph Zen
El cardenal Zen recibe el apoyo de obispos católicos al comenzar su juicio en China
Varios líderes católicos han apoyado públicamente al cardenal Zen, cuyo juicio comenzó ayer. Asimismo activistas por los derechos humanos han mostrado su apoyo al cardenal y al resto de enjuiciados.
El obispo emérito de Hong Kong, de 90 años, junto con otras cinco personas se enfrentan a un juicio por no registrar de forma adecuada un fondo de recaudación para brindar apoyo legal y médico a los arrestados y heridos en las protestas de 2019 en Hong Kong contra el gobierno chino.
Entre los líderes que han mostrado su apoyo se encuentra el Prefecto emérito de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y actual Gran Maestre de la Orden del Santo Sepulcro en Jerusalen, Fernando Filonil. El cardenal escribió en el medio italiano Avvenire el 23 de septiembre.
«Su respeto y apoyo a la persona han sido siempre el pilar de su visión humana y sacerdotal, y así ha sido hasta ahora, aunque durante estos días vaya a ser juzgado en Hong Kong. Su integridad moral e ideal se consideraron del más alto nivel cuando Juan Pablo II lo nombró obispo y Benedicto XVI lo creó cardenal».
Continúa elogiando al Cardenal, que es «un «hombre de Dios»; a veces poco moderado, pero sumiso al amor de Cristo, que quiso que fuera su sacerdote y profundamente enamorado, como Don Bosco, de la juventud. Por ello fue un maestro creíble».
Además, el obispo Athanasius Schneider también se ha pronunciado sobre el caso a través de un tuit en el que pedía protección divina para Zen, «un hijo leal de la iglesia».
Por otro lado el 1 de septiembre, el cardenal Müller, Prefecto emérito de la Congregación de la Doctrina de la Fe, lamentó que Zen no se encontrara en la reunión del colegio de cardenales en agosto.
En este sentido escribía: «Quizás la Iglesia deba ser más libre y no tan inclinada a la lógica mundana que se apoya en el poder, consecuentemente más libre para intervenir, y si fuera necesario, criticar a aquellos políticos que acaban oprimiendo los DD.HH. En este caso, imagino porqué no se critica a Pekín».