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El Gobierno cubano concedió la última amnistía por la visita de Francisco a la islaGTRES

La Iglesia en Cuba pide una amnistía de presos políticos para la próxima Navidad

El Gobierno de Cuba ya decretó distintas amnistías por las visitas de san Juan Pablo II, Benedicto XVI y Francisco

Los obispos católicos de Cuba han pedido la amnistía de «un buen número» de presos en la ya inminente Navidad como «gesto de clemencia o misericordia», según el mensaje difundido por la Iglesia cubana.

«En la Navidad, Dios se hace solidario con la humanidad», manifiestan los prelados en el texto, que pide extender el apoyo a «aquellos que sufren hambre, soledad, falta de libertad y esperan de nosotros un gesto de clemencia o misericordia».

«¡Cuánta alegría traería para sus familias y pueblo en general saber que, en esta Navidad, un buen número de quienes guardan prisión se les otorga la libertad y retornan a sus hogares para reinsertarse en la vida habitual e iniciar así el nuevo año!», subrayan.

El gobierno cubano ya decretó la amnistía de unos 200 presos por la visita de Juan Pablo II, en enero de 1998. También fueron liberados 2.900 por la visita de Benedicto XVI en marzo de 2012 y 3.500 en el 2015, por la visita de Francisco.

25 años de Navidad

Los obispos recuerdan en su comunicado que este diciembre se cumplirán 25 años «desde que las autoridades de Cuba decretaron la Navidad como un día feriado», precediendo la llegada de Juan Pablo II, el primer papa en visitar la isla.

Esta decisión del gobierno comunista «permite que las personas puedan compartir esta fiesta en familia y participar en las celebraciones en sus respectivas comunidades», indican.

Los prelados esperan en esta Navidad que los cubanos vuelvan «a soñar construir una patria de hermanos, donde cada uno pueda vivir con dignidad, donde nos escuchemos y dialoguemos para discernir el futuro».

Más de 500 manifestantes cumplen sentencias, algunos de hasta 30 años, tras participar en las históricas protestas del 11 de julio de 2021, que dejaron un muerto, decenas de heridos y más de 1.300 detenidos en el primer momento.

En 2010 el entonces presidente Raúl Castro negoció con la jerarquía católica la liberación de algo más de 130 presos políticos, entre los que estaban los 75 de la llamada «primavera negra». La mayor parte salió de cuba hacia España.