8 de abril: el Día del Pueblo Gitano para caminar juntos en la fe

Con motivo del Día Internacional del Pueblo Gitano, el departamento de Pastoral con los Gitanos de la Conferencia Episcopal Española ha preparado una sencilla campaña dirigida a las parroquias y comunidades cristianas de España. Monseñor José Antonio Satué, obispo responsable de la pastoral con los gitanos de la CEE, invita a todos los cristianos, en medio del camino sinodal, a celebrar este día bajo el lema Caminando juntos en la fe

Cada 8 de abril se celebra el Día Internacional del Pueblo Gitano, fecha instituida para conmemorar el día del primer Congreso mundial romaní-gitano de 1971 en la ciudad de Londres, Inglaterra.

En dicho Congreso se instituyeron la bandera y el himno gitano. La bandera verde y azul con una rueda de carreta roja en el centro simbolizan el cielo, el campo y el camino que emprendieron estos nómadas desde la India durante la invasión islámica del siglo IX.

El himno gitano, Gelem, gelem (Anduve, anduve), fue compuesto por Jarko Jovanovic y recuerda a los gitanos víctimas del nazismo. Asimismo, en el 4º Congreso Internacional Gitano en Serok, Polonia, se designó el 8 de abril como Día Internacional del Pueblo Gitano en recuerdo de aquel Congreso de Londres.

Con motivo de este día, el departamento de Pastoral con los Gitanos de la Conferencia Episcopal Española ha preparado material para celebrar este día y conmemorar a los beatos, como Ceferino Giménez Malla, conocido como el Pelé o el Tío Ceferino, laico de etnia gitana perteneciente a la Tercera Orden de San Francisco. Asesinado en Guerra Civil española, fue declarado mártir y beatificado por la Iglesia católica en 1997 por san Juan Pablo II.

La realidad de los gitanos

El lema elegido este año, en medio del camino sinodal, es Caminando juntos en la fe. Monsseñor José Antonio Satué, obispo responsable de esta pastoral, fija el objetivo de esta campaña para las parroquias y comunidades cristianas, y concienciar a toda la comunidad cristiana, de la realidad de los gitanos y de la pastoral gitana; dando a conocer la riqueza espiritual de los gitanos y, en particular, la vida de los beatos gitanos y favorecer cauces de colaboración entre las parroquias y la pastoral gitana.

Entre los actos más emotivos de este día está la 'Ceremonia del Río' en donde de manera simbólica se arrojan pétalos de flores en las orillas de los ríos, simbolizando la diáspora del Pueblo Gitano. Tras arrojar los pétalos, la ceremonia continua con el encendido de velas en memoria de las víctimas gitanas del Holocausto nazi. Cada año, se suman más instituciones y personas en un gesto de reconocimiento a una identidad cultural y a una historia y cultura apenas conocida por la mayoría de nuestra sociedad.

En el mundo, esta celebración va adquiriendo más notoriedad, ya que instituciones en España, Grecia, Rumanía y Francia, donde reside principalmente el pueblo gitano, realizaron actos conmemorativos y emitido declaraciones para la reivindicación de los derechos de esta etnia. Este es un 8 de abril cargado de solidaridad con todas las víctimas, así como con el pueblo gitano ucraniano y un llamado a los valores democráticos y de cohesión social para el conjunto de la sociedad.