Fundado en 1910

Fernando Ocáriz, prelado del Opus Dei, junto a Mariano Fazio, el vicario auxiliarIsmael Martínez Sánchez

El Opus Dei celebra en Roma un congreso extraordinario para su «reorganización»

La prelatura personal, constituida por 93 mil fieles de los cinco continentes, reflexiona a petición del Papa Francisco sobre el carisma heredado de su fundador, san Josemaría Escrivá de Balaguer y cómo se enmarca hoy en la organización de la Iglesia católica y en particular de la Santa Sede

Del 12 al 16 de abril, 274 fieles del Opus Dei se reúnen en Roma con sus superiores, el prelado, Fernando Ocáriz Braña, y sus vicarios, para reflexionar sobre su organización y carisma, respondiendo así a una petición del Papa Francisco.

En julio de 2022, el obispo de Roma publicó la carta apostólica en forma de motu proprio Ad charisma tuendum, con la que pedía una revisión de los estatutos que rigen al Opus Dei para que se adapten a la nueva organización de la Curia Romana, que entró en vigor en junio pasado.

El más vistoso cambio afecta a la nueva organización del Vaticano, según la cual, el Opus Dei deja de depender del Dicasterio de los Obispos y pasa a depender del Dicasterio del Clero, en consideración de la preeminente tarea que en esa institución desempeñan los clérigos, aclaró el Pontífice.

Carisma y gobierno

La carta apostólica dispone que el superior del Opus Dei, el prelado, en el futuro no sea obispo, como ya de hecho hasta ahora no era necesario. Con esta medida, desea «reforzar la convicción de que, para la protección del don peculiar del Espíritu», es decir, del carisma propio del Opus Dei, fundado por san Josemaría Escrivá de Balaguer, «es necesaria una forma de gobierno basada más en el carisma que en la autoridad jerárquica».

Manuel Sánchez Hurtado, director de la Oficina de Comunicación Internacional de Roma, en declaraciones a El Debate, considera que este congreso extraordinario constituye una «oportunidad maravillosa» para que el Opus Dei pueda responder precisamente a esta propuesta del Papa y, de este modo, a todos los fieles de la Obra», como se conoce familiarmente a la institución.

«Oportunidad estupenda»

La organización de su carisma y las implicaciones que tiene para la vida, considera el responsable de Comunicación, «constituye uno de los elementos que deberá afrontar el congreso. La respuesta será la que diga el congreso, no la mía. Lo que puedo asegurar es que es una ocasión estupenda para profundizar en nuestro carisma».

«Por ejemplo –aclara–, los fieles del Opus Dei son fieles de sus diócesis. El ser fieles del Opus Dei no les quita nada de ser fieles de sus diócesis. Esto los miembros del Opus Dei lo sabían, pero quizá no estaba explícitamente expresado en los estatutos».

El Papa Francisco, en una entrevista publicada el 18 diciembre pasado por el diario ABC, aclaraba que su petición de cambios «no es una cuestión sólo del Opus Dei», sino de cómo se encuadran en la Iglesia a partir de ahora las prelaturas personales.

«Soy muy amigo del Opus Dei»

Insistió en que estos cambios, como los que ha pedido a otras realidades eclesiales, buscan únicamente adaptar mejor la organización: «Soy muy amigo del Opus Dei, los quiero mucho y trabajan bien en la Iglesia. El bien que hacen es muy grande», aclaraba Francisco en esa entrevista.

Forman parte de la prelatura alrededor de 93.600 personas, de las cuales 2.093 son sacerdotes. Del total, aproximadamente, el 60 % son mujeres y el 40 % hombres. La distribución por continentes es la siguiente: África 4 %, América 36 %, Asia 4,5 %, Europa 54,5 %, Oceanía 1 %.

A la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz pertenecen, además de los sacerdotes de la prelatura, 1.957 presbíteros y también algunos diáconos, incardinados en distintas diócesis de todo el mundo.

Sánchez Hurtado reconoce que este congreso extraordinario «se vive en un contexto de serenidad y confianza», recordando la importancia que san Josemaría «siempre atribuyó a que el carisma del Opus Dei estuviera claro y bien integrado en la Iglesia».

Hacia el centenario del Opus Dei

De hecho, el director de la Oficina de Comunicación Internacional de Roma considera que este congreso se convierte en una oportunidad única para preparar el centenario del Opus Dei, que se vivirá entre 2028 y 2030, para el que ya se ha creado una comisión de la que es presidenta una joven laica brasileña, Fernanda Lopes.

«El centenario no va a ser simplemente un momento celebrativo, sino de reflexión sobre el carisma: ¿cómo lo vivimos? Pensemos en el futuro. Pensemos cómo vamos a vivir en el futuro del mundo y de la Iglesia la herencia recibida por san Josemaría», explica Manuel Sánchez Hurtado.

126 mujeres

En el congreso general extraordinario del Opus Dei participan 126 mujeres y 148 hombres, de los cuales 90 son sacerdotes. Provienen de los cinco continentes: África (6,6%), América (36%), Asia (6,2%), Europa (50%) y Oceanía (1,1%).

Los trabajos y conclusiones del congreso extraordinario no se harán públicos por el momento, pues se presentarán al Dicasterio para el Clero. Será después la Santa Sede quien comunicará las modificaciones finales a los estatutos aprobadas por el Papa, que es el legislador en la materia.

El Opus Dei es una institución pastoral de la Iglesia católica que fue fundada en Madrid, el 2 de octubre de 1928, por san Josemaría Escrivá de Balaguer. En 1983 san Juan Pablo II configuró el Opus Dei como prelatura personal.

Según explica en su documentación oficial, «la finalidad del Opus Dei consiste en contribuir a la misión evangelizadora de la Iglesia, promoviendo entre todos los cristianos una vida coherente con la fe en sus circunstancias ordinarias, especialmente a través de la santificación del trabajo profesional».