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Una fotografía de familia en un partido organizado por la Fundación Padre GarraldaFacebook

Las fundación del Real Madrid y la del padre Garralda se unen para ofrecer la mejor terapia contra la droga

La Fundación Real Madrid colabora con la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos en centros penitenciarios y ayuda a drogodependientes con un programa sociodeportivo

«¿Acaso tu nunca te has equivocado?» Con esta pregunta nos interpela la Fundación Horizontes Nuevos Padre Garralda, con su programa de ayuda a drogodependientes, la fundación tiene 100 plazas para proporcionar atención a personas en fase de deshabituación de dependencia a diferentes sustancias tóxicas y un lugar en el que vivir.

Tiene como objetivos, en régimen de alojamiento, que, bajo las indicaciones de los facultativos de tratamiento ambulatorio, la contención para mantener la abstinencia y acompañamiento diario a tratamiento y una supervisión flexible.

Una de las actividades más populares, es jugar al futbol, gracias a la colaboración de la Fundación Real Madrid.

El deporte para la persona

La Fundación Padre Garralda, que desde hace más de 40 años se dedica a la atención y la reinserción de personas con problemas de drogadicción, lo sabe bien. Por eso, desde hace 15 años, cuenta con la colaboración de la Fundación Real Madrid, que organiza partidos de fútbol con los pacientes y los voluntarios del centro.

Colaboran en diferentes líneas en centros penitenciarios y en programas para personas sin hogar desde hace más de una década. El programa sociodeportivo para personas sin hogar pretende contribuir a la recuperación anímica de sus participantes para facilitar su reinserción social. El centro de la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos, transmite valores del deporte como la motivación para el esfuerzo y la superación, o la importancia del compañerismo, la autonomía, la igualdad o la autoestima.

El fútbol es un deporte que apasiona a millones de personas en todo el mundo. Pero además de ser una fuente de entretenimiento y diversión, el fútbol puede tener un papel muy positivo en la rehabilitación de personas que sufren problemas de adicción a las drogas.

Valor terapéutico

Según diversos estudios, la actividad física en general, y el fútbol en particular, pueden ayudar a los drogodependientes a recuperar su salud física y mental, a mejorar su autoestima y su autocontrol, a fomentar su integración social y a ocupar su tiempo libre de forma saludable.

Estos encuentros deportivos tienen un gran valor terapéutico, ya que permiten a los pacientes disfrutar de un momento de ocio sano, compartir experiencias con otras personas que han superado o están superando su adicción, y sentirse valorados y apoyados por una entidad tan prestigiosa como el Real Madrid.

Además, el fútbol les enseña valores como el respeto, el esfuerzo, la solidaridad y el trabajo en equipo, que son fundamentales para su proceso de rehabilitación y para su futura reinserción social y laboral.

Por todo ello, el fútbol es una herramienta muy eficaz para rehabilitar drogodependientes, ya que contribuye a mejorar su calidad de vida y a prevenir las recaídas. Así lo demuestran los testimonios de los propios pacientes, que aseguran que el fútbol les ha dado una nueva oportunidad para salir adelante y recuperar su dignidad como personas.

Colaboración

Actualmente, la práctica de actividad física y deporte ha pasado a formar parte del mundo penitenciario como un derecho importante de los internos. Por ello, es necesario seguir desarrollando programas sociales de estas características que apoyen y desarrollen los valores como parte del desarrollo integral de la persona en este tipo de contextos. Los resultados del estudio muestran que el proyecto

Valores y Deporte ha tenido una influencia favorable en su formación como persona y en su vida penitenciaria. El trabajo en centros penitenciarios es una de las líneas de actividad más antiguas de la Fundación Real Madrid y se desarrolla, desde sus orígenes, en colaboración con la Fundación Padre Garralda-Horizontes Abiertos e Instituciones Penitenciarias.