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Santo Tomás de Aquino, de Murillo

Tomás de Aquino, 700 años de santo: un cráneo peregrino y un nuevo relicario

Tras su canonización, el cuerpo del recién hecho santo fue hervido y sus restos repartidos por el mundo en forma de reliquias

El 18 de julio de 1323, Juan XXII canonizaba a santo Tomás de Aquino en la catedral de Aviñón. No era la primera vez que se celebraba su llegada a los altares. Cuatro días antes, en el palacio de los Papas de la localidad francesa, ante la presencia del rey de Nápoles y su familia, el obispo de Roma entonó varios sermones alabando a Tomás. No obstante, fue el 18 cuando se publicó la bula de canonización, en la que se declaraba que su fiesta se celebraría cada año el 7 de marzo.

El conocido Doctor de la Iglesia tenía entonces algunos detractores, sobre todo entre los franciscanos –él era dominico–. Cuenta la tradición que un fraile seguidor de san Francisco de Asís dijo que «preferiría morir antes de ver el día en que fue canonizado Tomás». También se dice que murió un día después de la canonización.

El cráneo de santo Tomás de Aquino

Tras la celebración, el cuerpo del recién hecho santo fue hervido y sus restos repartidos por el mundo en forma de reliquias. Tomás de Aquino, aunque era dominico, murió de camino al segundo concilio de Lyon en un monasterio cisterciense en Italia, cuyos miembros no querían devolver los restos mortales del santo a su orden y los reubicarían varias veces. En este camino, le cortaron la cabeza al cuerpo y la mano derecha, que entregaron a una de sus hermanas.

Todavía hoy el cráneo de Santo Tomás se encuentra en el lugar en el que murió: la abadía de Fossanova. Con motivo de su séptimo centenario se le ha colocado en un nuevo relicario, creado por Augustin Frison-Roche y bendecido en una misa celebrada el pasado 27 de enero. En la obra de arte se mezclan detalles de orfebrería, carpintería, ebanística, escultura y costura. Es la primera vez desde la Edad Media que la reliquia se expone a los fieles y que ha peregrinado de Toulouse a Burdeos.

Cuando se abrió el antiguo relicario, en febrero de 2023, los dominicos del convento jacobino de Toulouse, encontraron, además del cráneo, documentos que atestiguan la autenticidad de la santa reliquia –una iglesia en Italia afirma tener otro cráneo de santo Tomás–.

Antes de febrero, la caja de madera donde se guardaban los restos se custodiaba bajo el altar de los jacobinos de Toulouse, pero el triple jubileo que empieza a celebrarse este 18 de julio ha obligado a sacarlos: el 700 aniversario de su canonización, el 750 de su muerte y el 800 de su nacimiento. La Penitenciaría Apostólica ha concedido indulgencia plenaria a los fieles que veneren sus reliquias con motivo de esta triple celebración.