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El Papa Francisco durante la última JMJ de Lisboa 2023GTRES

Qué esperamos los católicos del Sínodo, ¿sabemos qué es una Iglesia sinodal?

Será también una ocasión para fortalecer la comunión entre las Iglesias particulares y la Iglesia universal, así como para abrirse al diálogo con el mundo contemporáneo

El Sínodo de los Obispos 2023 será un acontecimiento histórico para la Iglesia que se propone vivir y profundizar en su vocación sinodal, es decir, de caminar juntos como Pueblo de Dios, en comunión, participación y misión. Así lo ha expresado el Papa Francisco, que ha convocado este Sínodo en dos partes: una primera sesión en octubre de 2023 y una segunda en octubre de 2024.

¿Qué es una Iglesia sinodal?

Según el documento preparatorio del Sínodo, se trata de «hacer memoria sobre cómo el Espíritu ha guiado el camino de la Iglesia en la historia y nos llama hoy a ser juntos testigos del amor de Dios; vivir un proceso eclesial participado e inclusivo, que ofrezca a cada uno –en particular a cuantos por diversas razones se encuentran en situaciones marginales– la oportunidad de expresarse y de ser escuchados para contribuir en la construcción del Pueblo de Dios; reconocer y apreciar la riqueza y la variedad de los dones y de los carismas que el Espíritu distribuye libremente, para el bien de la comunidad y en favor de toda la familia humana».

Para ello, el Sínodo se desarrollará en tres fases: una primera fase diocesana, que comenzó en octubre de 2021 hasta abril de 2022; una segunda fase continental, que empezó en septiembre de 2022, hasta marzo de 2023; y una tercera denominada universal, que se celebrará en Roma en las dos sesiones mencionadas. En cada fase, se buscará la escucha del Espíritu Santo, la consulta a los fieles y las Iglesias locales, y la elaboración de propuestas concretas para favorecer la sinodalidad.

Será también una oportunidad para escuchar al Espíritu Santo y al pueblo de Dios en su diversidad y riqueza

Una renovación

El Sínodo de los Obispos 2023 será, por tanto, una oportunidad para renovar la Iglesia desde dentro, siguiendo el impulso del Concilio Vaticano II y el magisterio del Papa Francisco. Será también una ocasión para fortalecer la comunión entre las Iglesias particulares y la Iglesia universal, así como para abrirse al diálogo con el mundo contemporáneo. Será, en definitiva, un signo de esperanza para una Iglesia que quiere ser fiel al Evangelio y al servicio de la humanidad.

El Sínodo de los Obispos 2023 abordará el tema de la sinodalidad, es decir, el modo de ser y actuar de la Iglesia como Pueblo de Dios que camina junto, en comunión, participación y misión. Según el documento preparatorio, se tratarán los siguientes temas principales:

  • La memoria de la Iglesia: cómo el Espíritu Santo ha guiado el camino de la Iglesia en la historia y nos llama hoy a ser testigos del amor de Dios.

  • La participación en la Iglesia: cómo se vive un proceso eclesial inclusivo y consultivo, que ofrezca a todos los fieles la oportunidad de expresarse y ser escuchados.

  • Los dones y los carismas en la Iglesia: cómo se reconocen y se aprecian la riqueza y la variedad de los dones y los carismas que el Espíritu distribuye para el bien de la comunidad y de toda la humanidad.

  • La comunión en la Iglesia: cómo se realiza la comunión entre las Iglesias particulares y la Iglesia universal, así como con las otras Iglesias y comunidades cristianas y con las demás religiones.

  • La misión de la Iglesia: cómo se abre la Iglesia al diálogo con el mundo contemporáneo, a la luz del Evangelio y del magisterio del Papa Francisco.

El Sínodo de los Obispos 2023 contará con la participación de diversos miembros del pueblo de Dios, que representarán a las Iglesias locales, las conferencias episcopales, las Iglesias orientales católicas, los dicasterios de la Curia Romana, las órdenes religiosas, los movimientos eclesiales, las asociaciones laicales y otros organismos. Según la lista publicada por la Santa Sede, los participantes se dividen en tres tipos:

  • Los miembros ex officio, que son aquellos que participan por su función, como el Papa, el secretario general del Sínodo, los presidentes de las conferencias episcopales y los jefes de los dicasterios de la Curia Romana.

  • Los miembros ex electione, que son aquellos que han sido elegidos por las conferencias episcopales o por los sínodos de las Iglesias orientales católicas. Entre ellos se encuentran los tres obispos españoles que fueron elegidos por la Asamblea Plenaria de la CEE en abril: Mons. Vicente Jiménez Zamora, Mons. Luis Argüello y Mons. Francisco Conesa.

  • Los miembros ex nominatione pontificia, que son aquellos que han sido nombrados directamente por el Papa Francisco. Entre ellos se encuentran varios cardenales, arzobispos, obispos, sacerdotes, religiosos y religiosas, diáconos permanentes, laicos y laicas, jóvenes y personas con discapacidad.

Estas figuras tendrán la tarea de coordinar y facilitar el desarrollo del Sínodo.

El Sínodo de los Obispos 2023 será una ocasión para que todos los participantes puedan aportar sus experiencias, reflexiones y propuestas sobre el tema de la sinodalidad. Será también una oportunidad para escuchar al Espíritu Santo y al pueblo de Dios en su diversidad y riqueza.