Fundado en 1910

La pequeña Indi Gregory

Los obispos ingleses piden un cambio en la ley tras el caso de Indi Gregory

​McKinney y Sherrington se comprometen a contribuir « a un debate más amplio sobre cuándo un tratamiento se vuelve desproporcionado» y sobre «el deber de continuar con los cuidados básicos»

Los obispos católicos de Inglaterra y Gales han afirmado que la muerte de Indi Gregory, el bebé de ocho meses en torno a la que se desarrolló una dura batalla legal en Reino Unido «muestra de nuevo la necesidad de que se dé un paso mayor a la voz de los padres en estos casos complejos y sensibles».

La carta está firmada por Patrick McKinney, obispo de Nottingham –donde han sucedido los hechos— y John Sherrington, responsable de defensa de la vida de la Conferencia Episcopal católica inglesa. Para lograr su objetivo de dar voz a los padres han propuesto reformar la Ley de Sanidad y Cuidados de 2022.

Los obispos sugieren recuperar una enmienda presentada el año pasado en la Cámara de los Lores por la baronesa Ilora Finlay sobre al resolución de conflictos en el ámbito de los cuidados paliativos infantiles. En la propuesta, se sugería un proceso de mediación para situaciones en que los padres y los médicos no tienen la misma opinión sobre qué pasos dar en la atención a los menores.

McKinney y Sherrington se han comprometido a contribuir « a un debate más amplio sobre cuándo un tratamiento se vuelve desproporcionado» y sobre «el deber de continuar con los cuidados básicos». Ambos obispos han aprovechado para expresar sus condolencias a la familia Gregory: «Con profunda tristeza expresamos nuestro más sentido pésame a Dean y Claire, padres de Indi Gregory, quien falleció hoy. Les aseguramos nuestras oraciones y las de toda la comunidad católica, incluido el Papa Francisco, en este momento triste», indican los obispos.