Ortega cancela otras 25 órdenes religiosas en Nicaragua y carga las limosnas con impuestos
Esta medida también se aplicará a entidades como escuelas e organizaciones sin ánimo de lucro, aunque los únicos que van a quedar exentos serán son las instituciones de naturaleza sindical
el régimen de Nicaragua ha impuesto nuevas medidas para acorralar la actividad de la Iglesia en el país. Ortega ha ordenado extinguir la personalidad jurídica de más de 25 órdenes religiosas, entre ellas los franciscanos, carmelitas y agustinos, junto a grupos laicos y otra organización de Cáritas diocesana. En total han sido 1.500 las organizaciones no gubernamentales que han sido obligadas a cerrar.
Estas se suman a las más de 5.000 oenegés que ya han sido extinguidas en Nicaragua desde las protestas de 2018. Todos sus bienes van a ser confiscados por las autoridades sandinistas. Según se informa el diario oficialista La Gaceta, dichas organizaciones no habrían cumplido la ley al no declarar estados financieros «con desgloses detallados de ingresos y egresos, balance, detalle de donaciones y sus juntas directivas» de todos sus años de actividad.
Además, Daniel Ortega va a obligar a pagar impuestos a la Iglesia católica, que deberá tributar entre el 10 y el 30 % de sus ingresos anuales, la mayoría de las limosnas del pueblo. Esta medida también se aplica a otras confesiones religiosas y surge después de que el dictador haya derogado el punto en la Ley de Concertación Tributaria que eximía del impuesto sobre las rentas a la Iglesia.
Esta medida también se aplicará a entidades como escuelas e organizaciones sin ánimo de lucro, aunque los únicos que van a quedar exentos serán, de nuevo según La Gaceta, son las instituciones de naturaleza sindical, los partidos políticos, Cruz Blanca Nicaragüense, Cuerpo de Bomberos y comunidades indígenas que tengan personalidad jurídica.