Agenda internacional vaticana
Francisco visitará la tumba del último Pontífice que renunció antes de Benedicto XVI
El viaje se producirá un día después de la creación de 21 cardenales en San Pedro y un día antes del inicio del consistorio que va a analizar la aplicación de la nueva Constitución Vaticana
Pietro da Morrone, un ermitaño del siglo XIII, fue elegido Papa en julio del año 1294 con el nombre de Celestino V. A los pocos meses de presidir la Iglesia decidió renunciar para volver a la vida monástica. Se trata del último Pontífice que dejó el cargo antes de Benedicto XVI. El Papa Francisco irá a visitar su tumba, en la basílica de Collemaggio, en L’Aquila, el próximo 28 de agosto.
La fecha de la visita no es indiferente. El viaje en helicóptero a esta ciudad, a 130 kilómetros de Roma, se producirá un día después de la creación de 21 nuevos cardenales, en la basílica de San Pedro. Al día siguiente, arranca el Consistorio, de los días 29 y 30 de agosto, para analizar la aplicación de la nueva Constitución del Vaticano, Predicate Evangelium, al que están invitados los 229 cardenales de la Santa Sede.
Más evangelización
Desde este 5 de junio, día de Pentecostés, el Vaticano cuenta con una nueva carta magna, que reforma la Curia y trata de orientar más toda la estructura hacia la acción evangelizadora. Se trata de uno de los objetivos que se planteó Francisco desde el principio de su Pontificado y en el que ha trabajado con un estrecho grupo de cardenales durante todos estos años.
El templo en el que está enterrado Celestino V fue promovido por él mismo antes de ser elegido Papa. En la basílica de Collemaggio instauró un Jubileo Anual dedicado al perdón, que lleva el nombre de la Perdonanza. Fue inaugurado en los pocos meses en que se mantuvo como Pontífice, en 1294, y concede la indulgencia plenaria –el perdón total de la pena por los pecados– a quienes visiten la basílica entre los días 28 y 29 de agosto, después de haberse confesado y comulgado.
El lugar del Perdón
En la visita a este templo de L’Aquila el Papa Francisco presidirá el rito de apertura de la Puerta Santa del Templo y celebrará la Santa Misa. Previamente, el Santo Padre tiene previsto encontrarse con familiares de las víctimas del terremoto de L’Aquila, del año 2009, que destruyó gran parte de una ciudad que aún no se ha recuperado por completo. De hecho, visitará el Duomo de L’Aquila, que se encuentra en fase de reconstrucción.
Tras esta visita de un día a este lugar del Perdón, muy popular en el centro de Italia, el Papa mantendrá dos días de Consistorio con todos los cardenales. Es algo que no había hecho en sus nueve años de Pontificado, ya que ha preferido gobernar la Iglesia con el apoyo de un grupo restringido de purpurados.
A partir del 27 de agosto, si no fallece alguno de los actuales, el Colegio Cardenalicio estará compuesto por 229 purpurados, de los cuales 132 serían electores en un posible Cónclave, al no haber superado los 80 años. Se trata de 17 cardenales, más de los 115 que participaron en el Cónclave del año 2013, en el que salió elegido Francisco. El Papa ha impulsado una mayor participación de cardenales de Asia y África, continentes donde más crece la Iglesia Católica en la actualidad.