Fundado en 1910

El palacio de Propaganda Fide, en la Plaza de España de Roma

Propaganda Fide, la Congregación que paró los pies a España y Portugal en las misiones

Se cumplen 400 años de la institución que permitió al Papa controlar la Evangelización internacional

Se cumplen 400 años del nacimiento de la Congregación Propaganda Fide, una institución nacida en 1622 y que desde el pasado mes de junio se ha integrado en el Dicasterio para la Evangelización. Su objetivo era coordinar la difusión del Evangelio en territorios donde apenas se conocía, como África, Asia o América del Sur. Una tarea urgente, ya que el protestantismo presente en Inglaterra y Holanda, dos imperios comerciales en expansión, empezaba a difundirse también en sus colonias durante el siglo XVII.

Coordinar esta labor misionera suponía también arrebatar el control a los reyes de España y Portugal. Así lo afirma monseñor Camillus Johnpillai, responsable de Departamento en el Dicasterio para la Evangelización. En la Constitución de esta nueva entidad se establecía claramente que corresponde a la Santa Sede la difusión del Evangelio en todo el mundo. El Papa Gregorio XV aseguraba así que la Evangelización se realizara de forma ordenada y con los mismos criterios, al margen de la autoridad política.

La realidad es que en el siglo XVII distintas órdenes religiosas, sobre todo de España y Portugal, son las que mayoritariamente transmitían el Evangelio en América y en el Lejano Oriente. La Santa Sede cuenta con su ortodoxia, pero desconfía de la lealtad a sus respectivos soberanos.

El impulso de Urbano VIII

El Papa Gregorio XV apenas pudo poner por obra sus ideas, ya que muere un año después de la creación de Propaganda Fide. Su sucesor, el Papa Urbano VIII, es quien impulsa de forma notable el papel de esta nueva institución. Con él se crea un programa de estudios para los religiosos y sacerdotes que se comprometían a salir en misión, materializado en el Colegio Urbano, germen de lo que es hoy la Pontificia Universidad Urbaniana. Una entidad, situada junto a la Plaza de San Pedro, que hoy mantiene ese mismo espíritu misionero y cuenta con estudiantes de todo el mundo.

El Papa Urbano también promueve las traducciones y la impresión de libros, creando en 1626 una Imprenta Políglota, en la que se editan publicaciones que servirán para evangelizar en todo tipo de lenguas. Junto a ello, también gestiona la financiación económica de la actividad misionera, un aspecto clave para poder enviar religiosos por todo el mundo.

El término «propaganda»

A día de hoy, 1.117 demarcaciones eclesiásticas, como diócesis, archidiócesis o prelaturas territoriales dependen directamente de la sección de Primera Evangelización, heredera de Propaganda Fide en el Dicasterio. Engloban gran parte de África, Asia y algunos territorios de Iberoamérica.

El nombre original de la Congregación, Propaganda Fide, cambia en el año 1979, debido a la connotación negativa del término «propaganda» tras la Segunda Guerra Mundial. Desde finales del siglo pasado el nombre era de Congregación para la Evangelización de los Pueblos, entidad que se ha integrado ahora, con la última reforma de la Curia, en el Dicasterio para la Evangelización.