Benedicto XVI está mejor «y ha participado en Misa desde su habitación»
La Santa Sede asegura que la condición del Papa emérito es «estable»
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La crisis de salud del Papa emérito parece superada. La Sala Stampa del Vaticano ha asegurado hoy que, por segundo día consecutivo, «ha logado descansar bien durante la noche». Además, ha confirmado que en la tarde del jueves pudo participar en la Misa, normalmente celebrada por monseñor Georg Ganswein, en su propia habitación.
«En el momento actual, su condición es estable», concluye el comunicado de la Santa Sede, confirmando la mejoría dentro de una situación crítica. Hay que recordar que Benedicto XVI tiene 95 años y desde hace meses los músculos del tórax han perdido fuerza, dificultando la respiración y el hecho de que pueda hablar con normalidad. Quienes lo han encontrado en las últimas semanas aseguran que apenas se notaba un hilo de voz. Un detalle que confirma la explicación que daba recientemente su secretario personal, monseñor Ganswein, al afirmar que «es como una vela que se va apagando».
Durante estos días, el pontífice emérito ha sido atendido por su médico personal, el cardiólogo Patrizio Polisca, quien también estuvo al servicio del Papa Francisco en los primeros años. No ha habido necesidad de trasladarle a un hospital y el tratamiento que ha recibido se ha aplicado en su residencia habitual, el monasterio Mater Ecclesia, dentro de los jardines del Vaticano.
Oraciones por todo el mundo
Desde que el Papa Francisco solicitó oraciones por el Papa emérito, el miércoles de esta semana durante la audiencia pública en la Plaza de San Pedro, se han sucedido numerosas iniciativas en diócesis de todo el mundo. En la tarde de hoy, viernes 30 de diciembre, está prevista una Misa en la catedral de Roma, San Juan de Letrán, presidida por el cardenal vicario de la diócesis, el cardenal De Donatis.
Mientras tanto, en la Plaza de San Pedro se han dado cita multitud de peregrinos y de fieles que han acudido a rezar a la Basílica. En las inmediaciones hay numerosas cámaras de televisión llegadas de distintas partes del mundo. Pese a que Benedicto XVI haya superado esta crisis, la edad y los antecedentes médicos del pontífice no permiten descartar un desenlace a corto plazo.