Gemelli, el hospital que salvó la vida al Papa
Francisco se encuentra en el nosocomio que salvó la vida a Juan Pablo II tras el atentado de 1981. Desde entonces, se ha convertido en la tercera residencia de los papas y está considerado el mejor hospital de Italia
En la mañana de este jueves, las personas que se acercaron en ayunas al Hospital Gemelli de Roma para hacerse análisis rutinarios de sangre encontraron más dificultad que de costumbre para aparcar: la vida de esta institución universitaria sanitaria se encontraba algo alterada por la presencia de un paciente ilustre, el Papa Francisco.
En el atentado contra el Papa
Y es que este nosocomio se ha convertido en el hospital de los papas desde que salvó la vida de Juan Pablo II el 13 de mayo de 1981, cuando el terrorista turco Mehmet Ali Ağca le disparó en la plaza de San Pedro de la Ciudad del Vaticano. En el entonces secretario personal, el hoy cardenal Stanisław Dziwisz, mientras tenía entre sus brazos desangrándose al Papa polaco, tuvo un reflejo que le salvó la vida: «llévennos a toda velocidad al Hospital Gemelli», dijo al conductor del coche.
No era una decisión evidente: hasta ese momento, los papas habían sido atendidos por sus médicos dentro de los muros vaticanos. Un Papa no tenía por costumbre presentarse a urgencias en un hospital. Si el cardenal Dziwisz no hubiera tomado esa decisión inmediata, Juan Pablo II hubiera muerto desangrado en el Vaticano. Abrió así una era en la que los papas han pasado a ser atendidos en un hospital, como el resto de los mortales.
El médico personal del Papa, Massimiliano Strappetti, tuvo ese mismo reflejo en la tarde de este miércoles, cuando Francisco tras la audiencia general comenzó a sentir dolores en el pecho. Inmediatamente, decidió llevarle en ambulancia a ese hospital para someterle a exámenes.
«Vaticano III»
Juan Pablo II se convirtió de este modo en paciente regular de este hospital, ingresando en otras seis ocasiones a lo largo de los años, la última dos meses antes de su muerte, en 2005. Con su típico humor bautizó al Hospital Gemelli con el nombre de «Vaticano III», pues los otros dos lugares de residencia del pontífice eran la tumba del apóstol Pedro, el verdadero Vaticano y Castel Gandolfo (residencia pontificia a 30 kilómetros de Roma).
El policlínico, hospital de la Universidad Católica del Sagrado Corazón, decidió entonces reservar una habitación para el Papa Juan Pablo II y sus sucesores. Se trata de un verdadero miniapartamento, sencillo y acogedor, en el décimo y último piso.
En la estancia, una especie de gran suite totalmente blanca con mobiliario austero, no sólo hay espacio para la cama, sino también un cuarto de baño, un televisor y los instrumentos necesarios para comprobar la tensión arterial y otros parámetros vitales.
Las habitaciones, situadas en un nivel absoluto de seguridad e intimidad, también incluyen otros espacios, en particular un pequeño salón con un sillón cama para los colaboradores del Papa.
También hay una pequeña capilla con un reclinatorio y un gran crucifijo para que el pontífice pueda recogerse en oración o, eventualmente, asistir a misa o celebrarla.
El largo pasillo de acceso está bajo el control conjunto de la Policía del Estado italiano, la Gendarmería vaticana y los hombres de seguridad del Policlínico.
La habitación del Papa tiene grandes ventanales que dan a la plaza de la entrada principal del hospital. Karol Wojtyla, en 2005, se asomó a esas mismas ventanas para saludar a los fieles y pacientes, y rezar el Ángelus, como acostumbraba a hacer en el palacio apostólico vaticano.
En este hospital, en el que también fue ingresada la Madre Teresa de Calcuta, el Papa Francisco también pidió ser internado, del 4 al 14 de julio de 2021, para someterse a una delicada operación de colon.
Mejor hospital de Italia
En 2023, en la clasificación anual de la revista estadounidense Newsweek, el Hospital Gemelli fue considerado el mejor hospital italiano por tercer año consecutivo. Tiene un acuerdo con el Ministerio de Salud italiano por el que forma parte del Sistema Nacional de Salud italiano. Pero sus funciones no se limitan a actividades hospitalarias, sino que también incluyen la investigación científica en el campo médico-biológico, la enseñanza de disciplinas médicas y de enfermería, y la formación continua del personal sanitario.
El Policlínico está situado a 8 kilómetros de la Ciudad del Vaticano, en el barrio romano Trionfale, en un terreno donado en 1934 por el Papa Pío XI a la fundación de la Universidad Católica.
Está dedicado a la memoria del sacerdote Agostino Gemelli (1878-1959), franciscano, médico y psicólogo italiano, fundador de la Universidad Católica del Sagrado Corazón de Milán.