¿Qué hago si se me han mojado los audífonos?
La profesora en Óptica, Optometría y Audiología de la Universidad CEU San Pablo María Luisa Sánchez Rodríguez, resuelve esta pregunta
Sobre todo al principio es frecuente que esto suceda ya sea por una ducha, la lluvia o un chapuzón en la piscina o la playa. Pasado un tiempo el audífono se convierte en parte de nosotros y se nos olvida que lo llevamos, pero no tenemos que preocuparnos ya que los audífonos están preparados para soportar esas situaciones, aunque lo recomendable siempre es que nos los quitemos cuando vayamos a nadar o ducharnos, por ejemplo.
Si bien los audífonos no son impermeables, un buen audífono cumple con el mismo estándar para dispositivos electrónicos, el IP68, que los smartphones modernos que también son capaces de soportar la exposición al agua siempre y cuando esta no sea demasiado prolongada. Para ello se emplean nanorecubrimientos. Estos no son más que una finísima capa de polímero de aproximadamente 60-80 nanómetros que recubre y protege cada parte del dispositivo electrónico ofreciendo una protección completa.
Día Mundial del Alzheimer
Cómo saber si tu padre tiene Alzheimer o solo pérdida de memoria por la edad
Cómo secar los audífonos
Y si ya se mojaron no te asustes, aquí te dejamos algunas recomendaciones:
- Retira rápidamente la batería si es posible y deja que se sequen. Para ello puedes colocarlos sobre un papel absorbente en una zona cálida, pero no se te ocurra usar el microondas, el horno o el secador de pelo ya que podrían producirse daños irreversibles.
- Si son recargables y no puedes quitar la batería deberás apagarlos y colocarlos en el cargador donde el calor que se produce ayudará a secarlos.
- Será útil el uso de un deshumidificador. Puedes encontrar dos tipos diferentes: los no electrónicos, que constan simplemente de un bote donde colocar los audífonos junto a un material desecante; y los electrónicos, que emplean por ejemplo sistemas de aire caliente. Si vives en la costa o en una zona especialmente húmeda te vendrá bien tener uno, con él podrás mantener secos los audífonos durante el tiempo que no los estés usando.
- María Luisa Sánchez Rodríguez, profesora del Grado en Óptica, Optometría y Audiología de la Universidad CEU San Pablo