El microbotox consiste en la inyección de microgotas de toxina botulínicaGTRES

Qué es el microbotox y para qué sirve

El bótox actúa sobre la contracción muscular, el Microbotox lo hace sobre la textura de la piel

Con el paso de los años la piel pierde elasticidad, la epidermis se vuelve más fina y frágil al tiempo que se pierde parte de la capa protectora de grasa. El resultado son la aparición de las arrugas y flacidez. Famosas como Sharon Stone, Elsa Pataky o Gwyneth Paltrow han recurrido al bótox para rejuvenecer sus rostros. En cirugía estética la toxina botulínica se inyecta con el objetivo de relajar la musculatura y detener la movilización muscular excesiva y los impulsos nerviosos atenuando las arrugas de expresión.

En los últimos años han aparecido nuevas técnicas encaminadas a rejuvenecer el rostro. Una de ellas es el Microbotox. Si el bótox actúa sobre la contracción muscular, el Microbotox lo hace sobre la textura de la piel, mejorando su luminosidad, hidratación y regulando la producción de sebo por parte de las glándulas sebáceas.

«El microbotox consiste en la inyección de microgotas de toxina botulínica tipo A diluida a nivel intradérmico, de manera superficial y en pequeñas dosis. Puede usarse sola o combinada con ácido hialurónico no reticulado o vitaminas. Tiene varias denominaciones: microtoxina, microbotox o mesobotox», explica la Dra. Elia Roo Rodríguez.

Acné y rosácea

La infiltración de pequeñas cantidades de toxina botulínica en la dermis reduce la producción de grasa de las glándulas sebáceas, el enrojecimiento de la piel y actúa sobre las inserciones musculares superficiales. Existen estudios científicos que demuestran su eficacia en tratamiento de acné y rosácea.

La eficacia se debe a su acción sobre un neurotransmisor: la acetilcolina, que actúa disminuyendo la acción de los músculos erectores del pelo, las glándulas sudoríparas y sebáceas de la piel y los sebocitos.

La toxina también inhibe la liberación de mediadores de inflamación: la sustancia P, otro neurotransmisor implicado en la respuesta inflamatoria, mejorando la piel enrojecida.

También se utiliza para mejorar la flacidez de la línea mandibular y del cuello en pacientes menos jóvenes, y como complemento al tratamiento convencional de toxina botulínica, para tratar áreas específicas como las arrugas en párpados inferiores o en mejillas. Los resultados duran de 3 a 4 meses.

mejorar la textura cutánea

  • Corregir la piel grasa
  • Disminuir el tamaño del poro
  • Reducir el enrojecimiento
  • Mejorar las arrugas finas

Efectos secundarios

Al ser un gran número de micro inyecciones el procedimiento puede resultar algo molesto, sensación que se reduce con aplicación previa de crema anestésica; puede darse una cierta inflamación y enrojecimiento leves que duran unas horas y algún posible hematoma.

Resulta fundamental que el microbotox sea aplicada en manos de un dermatólogo, el especialista de la piel, ya que si la técnica no es la correcta podría producirse alguna asimetría por acción sobre la contracción muscular.