Cómo elegir los calcetines para evitar lesiones en los pies
Es la primera prenda en contacto con los pies e influirá en la pisada
Al igual que no se usa la misma ropa en pleno invierno que en otoño o primavera o se viste de forma diferente cuando se va a trabajar que a una caminata por el campo, tampoco se debe utilizar el mismo tipo de calcetín. El Ilustre Colegio Oficial de Podólogos de la Comunitat Valenciana (ICOPCV) recomienda escogerlos siguiendo algunos parámetros como la época del año, el terreno por el que se camina y la actividad que se va a practicar.
Entre las alteraciones más comunes en los pies relacionadas con los calcetines destacan la hiperhidrosis (exceso de sudoración), hongos producidos por este problema, laceraciones, úlceras en personas diabéticas que los usen calcetines con costuras o empeoramiento de problemas circulatorios si estos oprimen en los tobillos, según ha señalado la entidad colegial en un comunicado.
Salud de los pies
Los expertos explican que, con la llegada del otoño, «es esencial prestar atención a los calcetines que utilizamos porque ellos también influyen en la salud de los pies». «Hemos de tener en cuenta que el calcetín es la primera prenda que está en contacto con nuestros pies, por tanto, la relación de nuestro pie con él influirá también a la que este tendrá con el calzado y con la pisada», ha afirmado Jorge Escoto, podólogo y miembro de la junta directiva del ICOPCV.
El especialista ha indicado que se debe «ir más allá de pensar que lo óptimo es utilizar un calcetín de algodón. Hoy en día hay múltiples tipos de materiales muy recomendables que serán más indicados o menos según el tipo de actividad que vayamos a desarrollar al igual que los diseños con los que son confeccionados».
Desde el ICOPCV se ha señalado que a la hora de seleccionar nuestros calcetines hemos de tener en cuenta diferentes variables como si se va a practicar deporte o no y escogerlo en función de la disciplina que se vaya a realizar.
Una prenda para cada uso
«El podólogo nos va a ayudar a elegir unos calcetines con sistema de amortiguación apropiado para nuestra actividad, o con fibras con refrigeración optimizada. Además, podemos aconsejar, si la actividad deportiva lo requiere, unos calcetines con sistemas de protección como refuerzo adicional en las zonas de mayor impacto y degaste, como son la puntera, el talón y media planta», ha comentado Jorge Escoto.
También se debe tener en cuenta el terreno por el que se mueve la persona porque, en función de la orografía del terreno, será recomendable un calcetín más bajo o más alto, que irá en consonancia con la altura de la caña del calzado que se utilice; la duración de la actividad o la temperatura ambiental.
¿Es bueno el algodón?
En este caso, señalan que el algodón absorbe muy fácilmente la humedad, y esto se traduce en tejidos empapados en sudor que, al enfriarse reducen el calor corporal dando una mayor sensación de frío y malestar. «Esto no sólo sucede en la actividad deportiva, también es muy común en determinadas profesiones especialmente aquellas que requieren el uso de calzado técnico», ha enfatizado el podólogo.
Para evitar este enfriamiento de los miembros inferiores, aconsejan escoger diseños que combinen varios tipos de fibras como son las denominadas 'huecas' para retener el calor corporal y expulsión del sudor, junto con fibras naturales como la lana de merino y la seda, ya que la combinación de ambas unidas a las naturales de origen marino ofrecerá una protección ideal en casos de temperaturas frías.
Pensando en los diabéticos
En el caso de personas con diabetes, problemas circulatorios, dérmicos o hiperhidrosis, «resultan muy adecuados calcetines fabricados con fibras naturales de origen marino y fibras de plata que favorecen la regeneración cutánea, así como la eliminación del exceso de sudoración al exterior. Esto evita la proliferación de bacterias. Si a esto le sumamos una estructura óptima, se intensifica la sensación de confort de estos calcetines por tratarse de calcetines sin costuras, que evitan comprometer el retorno venoso así como la fricción y, por tanto, la aparición de rozaduras», ha detallado.