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Día Internacional de la Mujer  Seis posturas de yoga para trabajar el bienestar mental

La app Female Mantras es una herramienta de autoconocimiento y gestión emocional

Cuidarse por dentro y por fuera es uno de los principales retos a los que se enfrenta la mujer del siglo XXI. Según el estudio Future of Dating 2023, tres de cada cuatro jóvenes encuentran más atractiva a una persona que está dispuesta a trabajar su bienestar mental. Con motivo del Día Internacional de la Mujer, una conocida aplicación de citas proporciona a las usuarias de la plataforma las herramientas necesarias para cuidar tanto su bienestar físico como emocional con la app Female Mantras, una definitiva práctica de yoga en movimiento diseñada para explorar la energía, fuerza y potencial femenino. Junto con la especialista en bienestar y yoga, Amalia Panea, se ha creado una rutina de ejercicio, compuesta por seis posturas, que sirve como herramienta de autoconocimiento y gestión emocional, permitiendo la conexión con nuestro cuerpo para encontrar la perfecta armonía.

Posturas de yoga

1. Postura de loto o Padmasana

Esta postura abre la cadera y flexibiliza tobillos y rodillas, tonifica la columna vertebral y el abdomen. La postura de meditación nos ayuda a calmarnos, a mejorar la concentración, a conectar con la respiración y a tomar conciencia de nuestro cuerpo.

Cómo se hace. Siéntate con las piernas cruzadas y los pies debajo de las rodillas. Apoya los isquiones, alarga la espalda y deja las manos sobre las rodillas. Puedes optar por Sukhasana o Medio Padmasana. Los más flexibles pueden intentar el loto completo, o Siddhasana. Cierra los ojos y concéntrate en la respiración y las sensaciones corporales.

2. Guerrero pacífico

La postura del guerrero pacífico o Shanti Virabhadrasana fortalece las piernas, tonifica los brazos y abre las caderas. Además, te conecta con tu fuerza interior, aumentando la confianza y autoestima. Promueve una energía serena que mejora la concentración y la sensación de presencia.

Cómo se hace. Abre las piernas el doble del ancho de tu cadera. Dirige el pie de delante al frente y perpendicular al borde de tu esterilla, mientras giras el de atrás hacia dentro. Flexiona la pierna de delante hasta alinear la rodilla con el tobillo y estira la de atrás, activando los cuádriceps. Apoya el brazo de atrás en la pierna estirada y eleva el de delante hacia el cielo, dirigiendo también tu mirada hacia arriba. Mantén la postura durante 5 respiraciones y luego cambia de pierna.

3. Postura de danza

La postura de danza o Natarajasana: Esta asana equilibrante abre el pecho con una suave flexión de espalda, mejorando la postura y fortaleciendo y flexibilizando la columna. Además, fortalece las piernas y promueve el equilibrio interno y externo, calmando la mente y armonizando el sistema nervioso.

Cómo se hace. De pie, pon el peso en el pie derecho y lleva hacia atrás el izquierdo. Coge el pie con la misma mano y por fuera. Estira el brazo de atrás y ve inclinando el torso hacia delante, abriendo el pecho y arqueando suavemente la espalda. Mantén de 3 a 5 respiraciones, vuelve lentamente y cambia de pierna.

4. Postura de la media paloma

La postura de la media paloma o Eka Pada Kapotasana facilita la apertura y flexibilización de la cadera, abre el pecho, tonifica y alarga la columna, estira glúteo y psoas. Abrir la cadera libera emociones y nos ayuda a reconectar con nuestro cuerpo. Si al final nos inclinamos hacia delante, creamos un espacio que invita al recogimiento y la introspección.

Cómo se hace. Colócate en cuadrupedia, estira una pierna atrás y lleva el pie que tienes delante hacia la mano contraria, flexionando la rodilla e intentando colocar la cadera paralela al suelo. Apoya las manos a los lados o en el pecho, alargando la espalda. Mantén 5 respiraciones y baja el cuerpo hacia el suelo, haciendo una almohada con las manos para apoyar la frente. Quédate el tiempo que quieras y cambia de pierna.

5. Postura sobre los hombros

La postura sobre los hombros o Sarvangasana es conocida como «la reina de las posturas invertidas», esta asana ofrece numerosos beneficios, como estimular la circulación sanguínea y la glándula tiroides, tonificar la espalda y el core, aliviar el estreñimiento y el cansancio de las piernas, y combatir el sedentarismo. Además, al invertir el cuerpo, proporciona una nueva perspectiva que puede ayudar a calmar la mente y tomar distancia emocional.

Cómo se hace. Tumbada boca arriba, flexiona las piernas con los pies en la esterilla y los brazos a los lados del cuerpo. Al inhalar, eleva las piernas y lleva las manos hacia la espalda, intentando formar un triángulo con la cabeza. Estira las piernas y acerca los dedos gordos de los pies, manteniendo la espalda en el suelo. Opciones: Si la postura es demasiado exigente, simplemente eleva las piernas o apóyalas en la pared. ¿Y para deshacerla? Baja suavemente las piernas hacia el suelo por detrás de la cabeza y, sosteniendo la espalda con las manos o apoyándolas en la esterilla, vuelve con la espalda redondeada hasta llevar las rodillas al pecho.

6. Postura de la diosa tumbada

La postura de la diosa tumbada o Supta Baddha Konasana abre la cadera (es muy recomendable para embarazadas) y el pecho, flexibiliza la parte baja de la espalda, alivia los dolores de la regla, contrarresta el estrés y favorece un estado de calma y relajación.

Cómo se hace. Tumbada boca arriba, junta las plantas de los pies, lleva los brazos hacia atrás o déjalos a los lados del cuerpo. También puedes colocar una mano en la tripa y otra en el pecho. Conecta tu respiración y mantén el tiempo que quieras. Si te tira demasiado la zona de las ingles, puedes colocar un cojín debajo de cada pierna.