Los test de antígenos volvieron a ponerse de moda durante el mes de abril tras haber descendido su venta en febrero y marzoEP

Coronavirus

Abril registra récords de venta de test de antígenos en las farmacias

La venta de test de antígenos ha vuelto a dispararse en abril en las farmacias españolas. Tras un periodo de relativa calma, en febrero y marzo, durante el pasado mes se registraron números de récord para 2022.

Las pruebas de autodiagnóstico fueron el producto estrella de las pasadas navidades, coincidiendo con la explosión de la sexta ola a causa de la variante ómicron.

Sin embargo, y coincidiendo con la bajada de contagios que se impuso como tendencia en el presente año, en paralelo a la relajación de las medidas y restricciones y el cambio en la vigilancia de la enfermedad, su uso decayó.

Más contagios en abril

El aumento de venta de este tipo de pruebas ha ido en paralelo a la nueva situación epidemiológica.

Ya sin mascarillas en interior y con la celebración prácticamente en normalidad de fiestas tan singulares como la Semana Santa, las Fallas o la Feria de Abril, lo cierto es que la incidencia y los contagios están experimentando repuntes en las últimas fechas.

Este rebrote puede explicar el mayor gasto que los españoles están volviendo a afrontar con los test de antígenos.

La prensa regional así lo recoge este viernes. Por ejemplo, en Navarra, las distribuidoras repartieron 51.000 unidades en el mes de abril frente a las 33.000 de marzo. En Cantabria, los diarios hablan de que la venta de test se ha triplicado desde marzo. En Galicia y Andalucía se han duplicado. De momento no hay datos a nivel nacional.

Mientras, la incidencia acumulada ha ido en aumento en el grupo poblacional de más de 60 años. En la actualidad y según el último informe hecho público por Sanidad, la IA media en los últimos 14 días se situó en los 813 casos.

Polémica durante las Navidades

Los test causaron furor en Navidades, aunque no se libraron de estar en el centro de la polémica.

​Las farmacias españolas llegaron a dispensar siete millones de unidades en la semana del 24 al 31 de diciembre, cuando más arreciaba la preocupación por la sexta ola de cara a compromisos sociales como la Nochebuena o Nochevieja.

​Su precio también fue objeto de críticas, ya que mientras en España había que comprarlos solo en farmacias y por un precio superior al de nuestros vecinos, en otros Estados europeos podían encontrarse mucho más baratos en los supermercados o incluso subvencionados.