La tasa de pensamientos suicidas entre los médicos es más alta que la de la población general, con un 7,2 % frente a un 4 %, respectivamente
Salud mental ¿Cuáles son las especialidades médicas que representan mayor tasa de ideación suicida?
La depresión o el estrés, agravados por la pandemia de la covid, acechan a los médicos
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¿Quién cuida a quienes nos cuidan? Ser un profesional de la salud no supone, sin embargo, ser de hierro. Y la depresión, el estrés y el síndrome del trabajador quemado puede acechar a los médicos tanto o más que cualquier profesión ajena al ámbito socio-sanitario.
Anatomía Patológica (13 %), Cirugía General (12 %) y Oncología (12 %) son, en este orden, las tres especialidades médicas que representan una mayor tasa de ideación suicida en este 2022.
El Informe sobre médicos suicidas 2022: la tragedia de la profesión, que ha elaborado la Escuela de Medicina de la Universidad de Penn State en los Estados Unidos, asegura que este grupo de profesiones médicas encabeza la lista de las tendencias suicidas, y son seguidas por Enfermedades Infecciosas (11 %), Emergencias (11 %), Endocrinología y Nutrición (10 %) y Medicina Familiar (10 %).
En el estudio han participado 13.000 médicos y muchos de ellos han compartido con los investigadores la experiencia que les llevó a sopesar el suicidio. Y es que el 21 por ciento de los encuestados presentó síntomas de depresión. La pandemia de la COVID-19 ha supuesto una especie de terremoto mental para todos ellos, ya que el 64 % de los participantes mostró signos de sentirse desanimado y triste.
Un problema de Salud Pública
La tasa de pensamientos suicidas entre los médicos es más alta que la de la población general, con un 7,2 % frente a un 4 %, respectivamente.
Indudablemente, el suicidio es un problema enorme de salud pública.
La OMS asegura que una de cada 100 muertes en todo el mundo es producto de una autolesión.
La organización radicada en Ginebra alerta que más personas se están suicidando que las que mueren de malaria, guerra o por un homicidio. La tasa se duplica entre los hombres.
Alertar, informar y acompañar
El suicidio es un problema de salud pública que mata cada año a 800.000 personas en el mundo, una cada 40 segundos, con un número estimado de intentos 20 veces superior y con graves consecuencias emocionales para entre seis y doce personas por cada fallecimiento.
En España, provoca cada año más de 3.500 muertes oficiales, el doble que por accidentes de tráfico. En este sentido cabe destacar que la comunicación responsable salva vidas.
Ante la ideación suicida, no debemos quitarle importancia a las palabras de esa persona. Sin juzgar, podemos y debemos escuchar, acompañar y ayudar en la búsqueda de ayuda.
Además, es bueno recordar que hay recursos a mano para una primera intervención de emergencia, como el recientemente puesto en marcha la línea 024, que funciona 24 horas, además del Teléfono de la Esperanza (717 003 717).
Este tipo de recursos están dirigidos a las personas que tienen ideas suicidas, personas que conocen a alguna persona que está pasando por una situación delicada o que han perdido a un ser querido por suicidio. Su función es similar al 016 con la violencia machista.