No todo el mundo debe tomar una aspirina al díaGTRES

¿Puede una aspirina al día evitar un ataque cardiaco o derrame cerebral?

Los expertos advierten del riesgo que supone como medicamento preventivo para quienes no tienen problemas cardiovasculares

Desde hace décadas los pacientes con enfermedad de la arteria coronaria toman una aspirina diaria para reducir el riesgo de ataque cardíaco y accidente cerebrovascular isquémico. Sin embargo, los expertos tienen sus reticencias sobre los beneficios del ácido acetilsalicílico como preventivo para quienes no han sufrido un ataque cardiaco, un derrame cerebral o problemas cardiovasculares.

Como norma general, desde la Clínica Mayo se aconseja no tomar una aspirina diaria sin hablar primero con su médico. «Mientras que tomar una aspirina o dos ocasionalmente es seguro para la mayoría de los adultos si tienen un dolor o fiebre, tomar aspirinas a diario puede tener efectos secundarios graves, incluyendo sangrado gastrointestinal».

En la misma línea, el Dr. Robert Temple, M.D., subdirector de Ciencias Clínicas de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA), afirma de forma categórica: «No se debe seguir un tratamiento de aspirina diaria sin hablar primero con su profesional de la salud para que evalúe las ventajas y los riesgos», y añade: «Desde los años 90, los datos clínicos han demostrado que una dosis diaria de aspirina puede ayudar a prevenir la recurrencia en las personas que han sufrido un infarto de miocardio o un derrame cerebral, o que padecen una enfermedad vascular del corazón», lo que se conoce como «prevención secundaria».

No es un preventivo

Sin embargo, después de analizar minuciosamente los datos científicos de estudios importantes, la FDA ha concluido que estos no sustentan el uso de la aspirina como un medicamento preventivo para quienes no han sufrido un ataque cardiaco, un derrame cerebral o problemas cardiovasculares, un uso que se califica como de «prevención primaria». Las ventajas para tales personas no se han establecido, pero los riesgos —tales como un sangrado peligroso en el cerebro o el estómago— no dejan de estar presentes, advierte el Dr. Temple.

Así actúa el ácido acetilsalicílico

La aspirina interfiere con la acción coagulante de la sangre. Cuando una persona sangra, las células coagulantes, las plaquetas, se acumulen en el lugar de la herida y forman un tapón que sella la apertura en el vaso sanguíneo, y detienen el sangrado.

Los expertos de la Clínica Mayo explican que esta coagulación también puede ocurrir dentro de los vasos que llevan la sangre al corazón. «Si los vasos sanguíneos ya se han estrechado a causa de una formación de depósitos adiposos en las arterias (ateroesclerosis), un depósito adiposo en el recubrimiento del vaso puede romperse, exponiendo la sangre a la pared interior de la arteria, que entonces forma un coágulo».

El coágulo impide que la sangre fluya al corazón y provoca un ataque cardíaco. La terapia con aspirina reduce la acción coagulante de las plaquetas, y posiblemente previene un ataque cardíaco.