Un joven escuchando música, que tiene efectos terapéuticos
Escuchar la música que te gusta puede ayudarte a aliviar el dolor crónico
Las personas con dolor crónico que seleccionan la música que escuchan experimentan un menor sufrimiento físico
En el día a día la música es una gran aliada. Si tradicionalmente se ha dicho que la música amansa a las fieras por su efecto tranquilizador, algunos estudios han ido más allá, recalcado sus efectos sobre la productividad al aumentar la concentración de los trabajadores. Ahora, un estudio, publicado en la revista Plos One, concluye que las personas con dolor crónico que seleccionan ellas mismas la música que escuchan experimentan un menor sufrimiento físico que aquellas a las que se les impone una canción determinada.
«Las preferencias de las personas resultan el aspecto esencial del compromiso musical para promover el alivio del dolor. Si suena un tema que nos gusta, nuestro sistema de recompensa neuronal se estimula y nos motiva para seguir escuchando, lo que puede ser importante para mitigar las dolencias», cuenta a SINC Claire Howlin, de la Universidad Queen Mary de Londres (QMUL) y primera autora del estudio.
Si suena un tema que nos gusta, nuestro sistema de recompensa neuronal se estimula lo que puede ser importante para mitigar las dolencias”Investigadora de la Universidad Queen Mary de Londres
En un experimento a nivel mundial utilizando un diseño experimental aleatorizado entre grupos con dos niveles de elección (sin elección y elección percibida) y dos niveles de música (alta y baja complejidad), una muestra de 286 adultos que experimentaron dolor agudo informaron la intensidad del dolor y malestar antes y después de escuchar música. Se cocreó una pieza musical personalizada con un artista comercial para permitir la manipulación de la complejidad de la música mientras se controlaba la familiaridad y se facilitaba una auténtica experiencia de escuchar música.
Las personas que reportaron niveles más altos de participación activa experimentaron mayores disminuciones en la intensidad del dolor
En general, los hallazgos demostraron que un mayor control percibido sobre la música está asociado con beneficios analgésicos y que la elección percibida es más importante que la complejidad de la música. Destacando la importancia de la participación del oyente, las personas que reportaron niveles más altos de participación activa experimentaron mayores disminuciones en la intensidad del dolor en la condición de elección percibida que aquellas que informaron de niveles más bajos de participación activa.