Tras probar 50 fármacos observaron que el ceritinib, fármaco usado para tratar un tipo de cáncer de pulmón, logró suspender la CD39
Medicina
Un fármaco ya aprobado vuelve inofensiva el arma de las células cancerígenas
Este medicamento inhibe el proceso CD39 que forma la adenosina
Muchas células cancerígenas tienen una capa protectora llamada adenosina. Se trata de una molécula que desactiva el sistema inmunológico, estimula la formación de vasos sanguíneos que suministran oxígeno y nutrientes al tumor y consigue que las células malignas migren a otros órganos, produciendo metástasis en ellos.
Ahora, un estudio publicado en la revista Journal for ImmunoTherapy of Cancer anuncia haber encontrado un fármaco ya aprobado que inhibe la adenosina, lo que sería un hallazgo revelador para hacer frente al cáncer.
Los científicos de la Universidad de Bonn y el Centro Médico de Hamburgo-Eppendorf, en Alemania, cuentan que la adenosina se genera a partir de trifosfato de adenosina o ATP que es secretada por las células cancerosas. Para producirse, tiene que pasar por el proceso CD39. Si este se inhibe puede ayudar a que «apenas» se produzca esta molécula enfermiza, según señala la autora, Christa Müller.
Asimismo, sin esta molécula los tumores ya no estarían protegidos del sistema inmunológico, por lo que se activaría su respuesta y se enfrentarían a las células cancerosas.
Por ello, los esfuerzos de los investigadores se centran en inhibir la enzima CD39. Algo que, parece, han conseguido. Según el estudio, tras probar 50 fármacos observaron que el ceritinib, fármaco usado para tratar un tipo de cáncer de pulmón, logró suspender la CD39. Esto no solo ocurrió en el laboratorio, sino que su aplicación en cultivos de cáncer de mama triple negativo –un tumor extremadamente difícil de tratar– también fue positivo.
Efectos secundarios
No obstante, los autores avisan de que este medicamento inhibe una larga serie de enzimas, por lo que los efectos secundarios pueden llegar a ser considerables. Las investigaciones se centrarán ahora en modificarlo de manera que solo inhiba la CD39. El resultado podría combinarse con otras sustancias terapéuticas, como alguna que dé fuerza al sistema inmune, y así tener un efecto positivo en la lucha contra el cáncer.