Presbicia o vista cansada, ¿se puede operar?

Nuestra capacidad para ver las cosas de cerca empeora con la edad. La presbicia, conocida popularmente como vista cansada, no se puede revertir aunque es fácil de corregir con el uso de gafas o lentillas. Existe el tratamiento con láser que en los últimos años se ha ido mejorando hasta conseguir buenos resultados.

La presbicia generalmente se empieza a notar a mediados de los cuarenta, y al principio suele ser solo un problema a la hora de leer. En este caso, el uso de gafas es la solución más simple y efectiva. Quienes ya tenían que llevar gafas o lentillas con anterioridad pueden utilizar gafas con lentes varifocales o multifocales para no tener que cambiar entre diferentes pares. Las lentes de contacto multifocales son una alternativa a las gafas multifocales. También le permiten ver con claridad tanto los objetos cercanos como los distantes.

El tratamiento con láser y otros tipos de cirugía ocular se denominan cirugía refractiva. Cambian el ojo de una manera que corrige el problema de la visión. Según un estudio de la National Library of Medicine, la cirugía tiene sus riesgos. Las ventajas de no tener que usar gafas o lentes de contacto deben sopesarse frente a los posibles riesgos asociados con el procedimiento. Por ejemplo, los expertos explican que la visión espacial -su capacidad para juzgar qué tan cerca o lejos están las cosas- puede empeorar después, o de repente puede tener problemas para ver cosas que están más lejos.

Gafas y lentillas

La luz que ingresa al ojo a través de la pupila llega primero al cristalino del ojo. El borde exterior del cristalino está unido a un músculo circular (músculo ciliar) por fibras finas. Cuando este músculo se contrae y se relaja, cambia la forma del cristalino. Esto permite que el ojo se enfoque en objetos cercanos y objetos que están más lejos: cuando miras objetos cercanos, el músculo ciliar se contrae, haciendo que el cristalino se curve y se espese. Cuando miras cosas a lo lejos, el músculo se relaja y el cristalino se vuelve más plano y delgado. Al cambiar la forma del cristalino de esta manera (acomodación), la luz que ingresa al ojo se enfoca en la retina para producir una imagen nítida.

Lentes bifocales, trifocales o progresivos: Si ya usa gafas para otros problemas de visión, ahora necesitará lentes bifocales, trifocales o progresivos.

• Los bifocales corrigen la visión de cerca y de lejos. Una línea que puede ser vista o no, divide el lente. La parte inferior del lente refracta la luz para la visión de cerca. La parte superior refracta la luz de manera que pueda ver objetos distantes.
• Los trifocales tienen tres zonas en el lente para corregir la visión de cerca, la visión intermedia y la visión de lejos.
• Las lentes progresivas corrigen la visión como los bifocales y los trifocales. Sin embargo, en lugar de tener una línea que divide cada área refractiva, la refracción cambia gradualmente en el lente desde arriba hacia abajo.

Las lentes de contacto pueden ser una buena opción alternativa, especialmente para las personas que ya necesitaban gafas o lentillas antes de que comenzara la presbicia. Al igual que las gafas, las lentes de contacto «corrigen» el poder de refracción del cristalino natural del ojo.

• Contactos de monovisión. Corrigen la visión de un ojo para ver de lejos y del otro para ver de cerca. Es necesario adaptarse a los lentes de monovisión y entrenar al cerebro para ver de esta manera.
• Contactos multifocales. Tienen diversos anillos o zonas con diferentes graduaciones.

Tratamiento con láser

El servicio de Oftalmología de los Hospitales de Sanitas afirma que la presbicia se puede operar siendo la edad recomendada entre los 50 y 55 años. En la misma cirugía se puede aprovechar para corregir otros defectos refractivos, como la miopía o el astigmatismo.

• Cirugía láser. Mediante la aplicación del láser se corrige la curvatura de la córnea que produce los problemas de visión. Puedes aprovechar y corregir en la misma intervención otros defectos refractivos, como la miopía. En esta intervención se emplea el láser Excimer.
• Implante de lente intraocular. Se retira el cristalino y se sustituye por una lente intraocular que corrige la presbicia. Si tienes más defectos refractivos puedes optar por una lente intraocular que resuelva ambos problemas. Para trabajar en el cristalino, se suele optar por el láser femtosegundo.