El vídeo es un análisis detallado del «correcto» empleo de los táperesGTRESONLINE

Seguridad alimentaria en el hogar

¿Son seguros los táperes de plástico?

El tipo de plástico y el uso que hagamos de él hace que un táper de este material sea más o menos seguro

Los 'tuppers' o táperes se han convertido en recipientes indispensables en nuestros hogares. En una sociedad en la que la prisa es la reina y los horarios de trabajo no permiten, en muchas ocasiones, pasar tiempo en casa, estos contenedores versátiles y asequibles son ideales para guardar sobras, almuerzos para llevar y otros comestibles. Sin embargo, la seguridad de los táperes de plástico ha sido motivo de preocupación en los últimos años debido a la creciente conciencia sobre los posibles riesgos para la salud asociados con ciertos tipos de plástico y prácticas de uso incorrectas.

En los últimos años estos recipientes se han ido sofisticando y las leyes actuales obligan a que los materiales empleados sean aptos para el uso de alimentos. De hecho, en 2011 Europa prohibió el uso de bisfenol A, que actúa como disruptor endocrino, en los biberones, y en 2022 aprobó una nueva ley de residuos que extendió la prohibición del uso de esta sustancia tóxica en la fabricación de todos los envases de plástico. No obstante, no conviene bajar la guardia.

Tipos de plástico y seguridad

Uno de los aspectos más importantes a considerar al evaluar la seguridad de los táperes de plástico es el tipo de plástico utilizado en su fabricación. Los táperes suelen estar hechos de varios tipos de plástico, cada uno con sus propias propiedades y riesgos potenciales. Los plásticos etiquetados con los números de reciclaje 1, 2, 4 y 5 se consideran generalmente seguros para el almacenamiento de alimentos. Estos incluyen el polietileno de alta densidad (HDPE), el polietileno de baja densidad (LDPE), el polipropileno (PP) y el PET (tereftalato de polietileno).

Por otro lado, se debe evitar el uso de envases fabricados con plásticos etiquetados con los números 3 (PVC) y 6 (PS), ya que pueden contener sustancias químicas potencialmente dañinas. El PVC, por ejemplo, puede liberar cloro cuando se expone al calor, lo que puede ser perjudicial para la salud si se ingiere.

Uso adecuado

La seguridad de los táperes de plástico también depende de cómo se utilizan. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante. Algunos de estos recipientes están diseñados para el microondas, mientras que otros no son aptos para el mismo. Calentar táperes inadecuados puede provocar la liberación de sustancias químicas dañinas en los alimentos y dañar el contenedor.

Significado de los símbolos que aparecen en los táperesMinisterio de Consumo

Por otro lado no es recomendable usar táperes de plástico para guardar alimentos ácidos durante largos períodos, ya que los ácidos pueden acelerar la degradación del plástico y aumentar la probabilidad de que se liberen sustancias no deseadas en los alimentos.

Según la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), las situaciones de mayor riesgo son las siguientes:

  • En el proceso de calentamiento de la comida dentro de su envase
  • En productos ricos en grasas
  • En la conservación prolongada del producto (contacto de larga duración)
  • En general, la tasa de migración (contaminación) es baja en alimentos crudos o congelados, pero el riesgo aumenta en alimentos transformados, como las salsas grasas y en productos pasteurizados o esterilizados dentro del propio envase.

Cuidado y mantenimiento

El mantenimiento adecuado de los táperes de plástico es esencial para garantizar su seguridad. Lo más recomendable es evitar lavarlos con agua caliente, ya que esto puede causar la liberación de sustancias químicas. En su lugar, es mejor lavarlos con agua tibia y jabón suave. Además, es aconsejable inspeccionar regularmente estos recipientes para detectar posibles daños o rasguños que puedan permitir la migración de sustancias no deseadas a los alimentos.

Como con cualquier producto de cocina, los táperes de plástico tienen una vida útil limitada. Con el tiempo, pueden desgastarse y deteriorarse. Es importante reemplazarlos cuando presenten signos de deterioro, como agrietamientos, decoloración o deformaciones.