Día Mundial de la Endometriosis
Endometriosis, ¿cómo saber si ese dolor de regla es normal?
El 14 de marzo se celebra el Día Mundial de la Endometriosis
Dolor pélvico y abdominal continuos, molestias al defecar y orinar, estreñimiento, sangre en la orina o heces, cansancio, molestias durante o después de mantener relaciones sexuales, son algunos de los síntomas asociados a la endometriosis, una enfermedad o trastorno relacionado con el aparato reproductor femenino en la que tejido similar al que normalmente cubre el endometrio crece fuera del útero, como los ovarios, las trompas de Falopio y los intestinos lo que provoca inflamación y la aparición de tejido cicatricial en la pelvis.
La endometriosis es una enfermedad compleja que afecta a muchas mujeres de todo el mundo, desde el inicio de la primera menstruación hasta la menopausia y cuyo diagnóstico, en una gran parte de los casos, puede tardar entre 8 y 12 años.
Esta patología es una causa reconocida de infertilidad y está asociada a cambios en el estado de ánimo, ansiedad o depresión. Existen opciones terapéuticas que incluyen medicación analgésica, hormonal y anticonceptiva o, llegado el caso, la opción de intervenir quirúrgicamente, dirigidas a mejorar la calidad de vida de las mujeres que la padecen.
La regla no tiene porqué doler
Esta afección llega incluso a tener un componente limitante en el desarrollo de tareas cotidianas. A este respecto, la ginecóloga Miriam Al Adib, autora de libros como Hablemos de adolescencia… y de sexo y de amor y de respeto y de mucho más afirmaba en una entrevista a El Debate que aunque normalizamos que la regla tiene que doler y no tiene por qué ser así y explicaba: «las mujeres no somos lineales sino cíclicas, todo nuestro sistema cambia cíclicamente por acción de las hormonas. No solamente está la menstruación, hay cambios inmunológicos; metabólicos; hormonales …todos los sistemas de nuestro cuerpo cambian cíclicamente» y añadía: «Incluso en el sistema nervioso: en la primera fase del ciclo, por ejemplo, los estrógenos mantienen el cerebro más activo mientras que en la segunda parte del ciclo la progesterona activa el sistema GABA que hace un efecto más de apagado del cerebro, es decir, todos nuestros sistemas cambian cíclicamente».
«Dicho esto, –continua la ginecóloga– hay que diferenciar lo que es normal de lo que no lo es. Muchas veces algo que es normal lo consideramos patológico y sin embargo otras veces nos vamos al otro extremo y normalizamos lo que sí es patológico. Ahí, por ejemplo, están las mujeres que tienen un síndrome premenstrual severo o aquellas mujeres que tienen dolor con la regla incapacitante. De hecho, casi el 50 % de las mujeres con endometriosis tardan una media de ocho años en ser diagnosticadas porque normalizamos que la regla tiene que doler y una cosa es que moleste, que sea incómodo, que duela pero que ese dolor desaparezca con un paracetamol y otra cosa bien diferente es que no te puedas mover del dolor. Esto no es normal y hay que buscar ayuda profesional».
Qué puede ocasionar endometriosis
En la actualidad, según la OMS, se considera que se presenta como consecuencia de alguno de los factores siguientes:
- Menstruación retrógrada: durante la menstruación, la sangre menstrual (que contiene células endometriales) fluye hacia atrás a través de las trompas de Falopio hasta alcanzar la cavidad pélvica en lugar de salir del cuerpo a través del cuello uterino y la vagina. De ese modo, pueden depositarse células similares a las del endometrio fuera del útero, donde pueden implantarse y crecer.
- Metaplasia celular: es un proceso en el que las células adoptan una forma distinta. Algunas células situadas fuera del útero se transforman en células similares al endometrio y comienzan a crecer.
- Proliferación de células precursoras: estas células pueden dar lugar a la enfermedad, que luego se propaga por el organismo a través de la sangre y los vasos linfáticos.