Consejos
Dónde debes guardar el cepillo de dientes para evitar problemas de salud
Esta herramienta de higiene está expuesta a millones de microorganismos
La mayoría de las personas guardan el cepillo de dientes en el cuarto de baño, y si bien es conveniente tenerlo allí, este lugar está rodeado de gérmenes, por lo que puede no ser la mejor opción.
Sin embargo, antes de preocuparnos por los gérmenes que llegan a nuestro cepillo, debemos encargarnos de los que ya están allí. Para tener una buena salud bucal, es importante tener un cepillo limpio, y no importa si lo mantienes en un lugar que consideres pulcro, cada cierto tiempo el cepillo de dientes acumula gérmenes. Lo recomendable es que se cambie el cepillo de dientes cada 2 meses una vez iniciado su uso. También puede realizarse el cambio antes si las cerdas ya están muy desgastadas. Esto aplica tanto para cepillos eléctricos como manuales.
¿Cómo guardar el cepillo?
Aunque la mayoría de las personas mantienen su cepillo en vertical, otros lo almacenan con estuches en cajones y horizontalmente. Lo primero es saber que en condiciones ideales están puestos verticalmente, en un ambiente seco y no cerca de otros cepillos. Así se evita la transferencia de microorganismos.
En cuanto al almacenamiento, lo que debemos tener claro es que los cepillos no se almacenan. Muchos cepillos vienen con un capuchón para proteger las cerdas del exterior. Sin embargo, esto termina causando más daño del que pretende. Esta cobertura lo que causa es que se cree un ambiente de humedad que favorece la proliferación de microorganismos y terminan contaminando el cepillo aún más El capuchón debe usarse estrictamente para el transporte.
¿Dónde guardamos el cepillo de dientes?
Entonces, ¿cuál es el lugar ideal para dejar el cepillo? Una vez utilizado, como ya se mencionó, debe colocarse en posición vertical en un ambiente seco y alejado de otros cepillos. Asimismo, se recomienda mantenerlo en un lugar alejado del WC. Así evitamos contaminación cruzada con otras bacterias más peligrosas y que no forman parte de la flora bacteriana oral.
Asimismo, hay que saber lavarlo una vez utilizado. Se debe enjuagar bien para evitar que queden residuos de comida. Una vez enjuagado hay que agitarlo bien para deshacernos del exceso de agua. Y como ya se indicó, guardarlos verticalmente y que no toque otros cepillos.